“Imaginemos que corres contra una tortuga, la tortuga tiene una ventaja de diez metros, en el tiempo que te lleva recorrer esa distancia, la tortuga se mueve un metro tal vez y así para siempre. Eres más rápida que la tortuga, pero jamás puedes alcanzarla ¿Entiendes? Solo puedes reducir la ventaja. Si claro, puedes pasar a la tortuga, mientras no se contemple la mecánica involucrada, pero la pregunta del ¿Cómo? Resulta tan complicada que nadie lo resolvió en realidad, hasta que Cantor probó que “Algunos infinitos son más grandes que otros infinitos” ” - Peter Van Houten
Igual que Hazel, yo tampoco puedo hablar de nuestra historia, ni de matemáticas, pero igual que ella, yo también estoy seguro que entre el 0 y el 1 hay infinitos números, hay toda una infinidad de decimales, igualmente entre el 0 y el 2 también hay una infinidad de números pero mayor, eso paso en todos los números, entre toda la infinidad de infinitos hay más infinitos entre esos infinitos, pero cada infinito tiene su fin, aunque la esperanza es que en el fin se preserva la continuidad en otro infinito, en donde cada infinito deja su marca, tanto para bien como para mal, cada infinito es capaz de transformar el espíritu, en el cual lo importante no es el tamaño del infinito, sino la fuerza de este. Es bastante probable que cada infinito se corte en su transcurso, por lo dicho anteriormente solo la fuerza decidirá si este se volverá a unir y si no, este se cerrara y comenzara otra línea donde se forme otro infinito.
Pero y al final ¿Queda algo? Pues yo diría que sí, tu recuerdo, mi recuerdo, nuestro recuerdo, queda nuestro pequeño infinito. Puedo decir que ese infinito modificó mi existencia y estoy eternamente agradecido por eso.
Es probable que nos olvidemos de nosotros, olvidar a nuestro infinito, está destinado a eso, pero la marca ya está hecha, así que involuntariamente quedaste implantada en mí y ya es una acción irremediable.
No puedo dejar que te vallas, sin antes darte mi más fuerte abrazo y un adiós, te extrañaré demasiado, porque simplemente te quiero una infinidad para dejarte salir de mi alma tan fácilmente, lastimosamente mi léxico no es lo suficientemente amplio para expresar el idioma de mi corazón.
Y aquí la teoría del infinito, siendo esta mi carta de despedida.
Adiós bizcocho, conserva la marca que te dejó nuestro infinito.
Atentamente, tu compañero de clases, compañero de pan con bajante, ex integrante de los Almeida, casi integrante de tu familia, tu futuro esposo, burro de carga, cocinero preferido, lesionador de pie, psicólogo aprendiz de natación, mi socia de la productora, tu secuestrador, tu medio 3/4 novio, tu amigo, pero sobretodo tu hermano y una de las personas que más te quiere.
Clan G⅁ de por vida. :3
