Lo he entendido tarde. Me ha costado una barbaridad aceptarlo, y duele arde y quema, pero me aguanto.
Quiero dejar de ser ya tu juguete personal, tu espectáculo cómico particular.
Quiero dejar de llorar por algo que no tengo y esperar algo que no tendré.
Lo he perdido todo, me he ido quitando la ropa que me sobraba por el camino y los sentimientos han ido cayendo con ella.
Has hecho que me odie a mi misma aún más de lo que ya lo hacía, pero has hecho algo peor que eso. Has conseguido que dependa de alguien, de que este me vea atractiva o aquel diga que le hipnotizo, has hecho que dependa de un hombre para verme bien y eso no te lo perdonaré nunca.Me doy asco, y las cartas que dicen que ayudarán no ayudan, ni las canciones y por dios, has llegado a tocar tan profundo que escribir ya no es una pasión, es un reto. Es una forma de medir cuanto tiempo me queda antes de explotar y decir, o de explotar y morir.
Joder, has conseguido meterte por donde no entraba nadie y destrozarme.
Chicos la batalla más dura no fue Stalingrado, la batalla más difícil se está librando en mi interior.
Avanzan los tanques de guerra y, como no, me acaba de dar directo en el corazón. Me desangro, me desgarro y nadie lo ve.
Ondea la bandera, y el símbolo soy yo.
No hay nada más difícil que odiarte, porque siempre sabes que jugada voy a tratar de conseguir o cuando toca mover ficha.No hay nada más difícil que odiarte sabiendo que siendo las dos la misma nunca estaremos de acuerdo.