depression; seulmin

After Class

El silencio reinaba. Todos los alumnos estaban o en sus clubs, o ya se habrían ido de la institución. Yo seguía aquí, prefiero una escuela estúpida a mi casa, tengo padres geniales que intentan apoyarme pero... Es molesto tenerlos encima.

La puerta se abrió. Seulgi entraba apresurada, hasta que me vio, sentado en un escritorio pegado a la ventana.
—Oh... Jimin, hola.— Su sonrisa era forzada, que cosa le abran dicho sobre mi ahora.
—¿Que te dijeron de mi? ¿Que soy un pedofilo? ¿Asesino? ¿Suicida? ¿Mala influencia?— solté sin mas.
—...Que eras un suicida.— su expresión se suavizo, seguro fue la psicóloga a la que siempre se le sale todo.
—¿Que quieres que te diga? ¿Si es verdad o mentira?— suspire.
—No... Solo te quería decir que aquí estoy para ayudarte en lo que quieras.— solo dijo eso, sonrió y se fue.

No fui detrás de ella, solo observe la puerta, si, lo se, soy todo un personaje de Dorama, que corre detrás de su chica para bla bla bla. Esto es la vida real, y igual, no sirve de nada. Seguro solo lo dice para sentirse mejor consigo misma.
Mi celular comenzó a vibrar, mi madre me estaba llamando.
—Má, ¿que pasó?— conteste rápido.
—Oh, nada, ¿vendrás a casa?— suena preocupada, mire el reloj del celular, 5:36.
—Llegaré a las 8.— iré a un café o algo.
—Bueno, adiós car- — colgué.
Veré que hacer ahora.