Danny NO Catherine

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Llevan trabajando juntos desde que se creó el 5 0 hace ya dos años. Aunque al principio no se llevaban bien porque Mcgarrett lo había prácticamente obligado a trabajar con el, ahora podía decir que eran buenos amigos. Estaban dispuestos a dar la vida el uno por el otro.

Lo había conocido durante el primer mes que llevaba en el HPD, investigando un caso en común. De acuerdo a lo que le había dicho al reclutarlo estaba formando un equipo de élite que contaría con inmunidad otorgada por la misma gobernadora para resolver casos que requerían de atención especial.

Y es así como llegaron hasta allí empezaron siendo compañeros de trabajo y llegaron a convertirse en  ohana. Chin, Kono, Steve y él el detective Danny Williams.

Danny sabía que sentía una atracción casi inevitable por Steve , es decir, ese alfa irradiaba poder y mando desde donde se le viera y aunque el era capaz de hacerle frente como pocos omegas podrían hacerlo no podía evitar sentir esa atracción por el.

Es por eso que le dolía ver como Steve sufría por el abandono de Catherine justo cuando había estado decidido a pedirle matrimonio. El lo había apoyado como amigo ante todo porque quería que Steve fuese feliz que tuviera a alguien fuerte como el a su lado, y aunque quisiera ser él el que ocupará el puesto de la pareja del líder de 5 0 sabía que el alfa sólo tenía ojos para esa omega.

Así que cuando Steve lo invitó a beber el no se opuso, quería estar allí para su amigo, para ayudarlo a superar ese dolor.

Y ahí estaban ambos bebiendo en algún bar cerca de la casa del castaño, sabía que el alcohol no era buen consejero pero no podía evitar pensar que quería que Steve se fijará en el como omega y no sólo como un compañero de trabajo más, quería que lo tomará entre sus brazos, que lo hiciera suyo, que le de su marca, pero aquella vocecita que quería apagar con el alcohol aún seguía ahí fuerte diciéndole que no era buena idea hablar de eso con Steve que el iba a rechazarlo porque estaba enamorado de otra.

Ya era hora de dejar eso atrás y ayudar a su amigo empezando por llevarlo a su casa antes de que termine completamente borracho.

-Oye Steve creo que deberíamos irnos- dijo Danny empezando a levantarse del asiento que tenía frente a la barra.

-No quiero ir aún, quiero seguir bebiendo un poco más por favor- dijo mirándolo con un puchero en los labios.

-Esto esta mal, ya debes estar borracho si es que te atreves a hacer esos pucheros en frente de otras personas- dijo mirándolo con una sonrisa socarrona en la cara.

-Por favooor- imploro Steve cruzando sus dedos en señal de súplica.

-No, vamos a tu casa y allí sigues bebiendo todo lo que quieras ¿está bien?- concedió Danny

-Está bien- le dijo el seal parándose de su asiento y tomando las llaves del camaro.

-Un momento no vas a manejar en ese estado- dijo arrebatándole las llaves de sus manos y yendo hacia el asiento del conductor, espero a que Steve cerrará la puerta del copiloto para encender el camaro y tomar rumbo a la casa de Steve.

Todo el trayecto transcurrió  en un silencio cómodo. Al detener su vehículo frente a la casa de Steve miró a su acompañante y le preguntó.

-¿Quieres que te acompañe hasta tu puerta?- dijo mirando el estado del seal.

-Si por favor- dice abriendo la puerta del camaro y bajando de el.

Steve abrió la puerta y lo invitó a pasar, el aceptó y se sentó en el sofá en lo que Steve iba a la cocina por mas cervezas que tenía en su refrigerador.

La persona correctaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora