El día de la Boda

Uno

Dedicado al grupo de Facebook: TodoMomo  [Todoroki Shoto x Yaoyorozu Momo] 

Aunque ellas no lo sepan xD

Los personajes utilizados son propiedad de Kohei Horikoshi

.

.

.

PRIMERA PARTE
.
.
.

—Amor, estoy en casa. —anuncio la pelinegra entrando al departamento que compartía con su novio hace ya seis meses.

Había sido un día realmente agotador en la agencia, y aunque aquel día Yaoyorozu no tuvo trabajo de campo, le toco hacer muchos informes y cuentas para la policía, así que mentalmente estaba agotada. Además tenía mucha hambre.

Dejo sus llaves en la mesita ya acostumbrada y encendió las luces. Lo que vio a continuación hizo que se le cayera el bolso y el abrigo que tenía en manos.

En el sofá, en una posición totalmente incomoda y descuidada estaba su novio. Todoroki Shōto, quien parecía estar desmayado.

Momo corrió enseguida hacia él.

— ¡Amor, amor!—exclamaba la chica mientras volteaba a su novio.

El escenario no revelaba que el bicolor haya sufrido ningún ataque, y cuando reviso más de cerca noto como el chico se aferraba a una botella de licor.

—Estoy bien, estoy bien. —murmuraba Todoroki seminconsciente. —Joder, mi cuello. —se quejó mientras se incorporaba lentamente.

Al frente Momo le miraba muy molesta. Y sí, estaba enojada por el susto que le había hecho pasar apenas llego a casa. Pero por encima de su enojo, la chica estaba realmente confundida. En los años que llevaba en una relación con Todoroki jamás le había visto tan ebrio, no al punto de prácticamente colapsar en cualquier lugar. Shōto siempre se mostró y comporto como un chico que sabía medirse como un verdadero caballero.

Aquella actitud era muy inusual ¿Qué había pasado?

—Vamos a la cama. —suspiro la chica resignada a tener que cargar con él.

Momo no se consideraba alguien débil, ella era alta y fuerte, y creyó firmemente en que podía cargar con Todoroki hasta la habitación sin problemas, y tal vez hubiera podido, si este no se tambaleara en cada paso. Apoyado en la chica, Shōto apenas podía mantenerse en pie mientras paso a paso llegaban a la habitación.

De verdad estaba muy borracho.

Apenas llegaron a la habitación, Momo se vio arrojada a la cama. Por supuesto que se asustó, pues Todoroki, pese a ser muy intenso algunas ocasiones, nunca había sido tan violento con ella.

Frente a ella ya no estaba el borracho desorientado de hace unos segundos, ni siquiera su perfecto novio, frente a ella veía a un chico totalmente diferente, uno de mirada ensombrecida y de aura peligrosa.

Momo quiso protestar, pero sus palabras fueron calladas por la ardiente boca de su novio, este se arrojó encima de ella con un rápido movimiento aprisionándola con su cuerpo.

El beso se prolongó hasta el punto de asfixiarla, tuvo que empujar al chico para que le dejara respirar.

—Te amo, te amo, te amo tanto. —susurraba el chico entre besos que le repartía a lo largo de su cuello y pecho descubierto.

Momo tenía el corazón disparado, y estaba tan excitada como asustada. Podía sentir con claridad la erección del chico presionando su vientre.

—Shōto, estas borracho, no quiero hacerlo así. —alcanzo a decir la chica, en medio de suspiros, pues cuando Todoroki lamia de esa forma su cuello ella siempre se dejaba llevar.