Parte 14: Un regalo en la puerta

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Mientras me dirigía a mi habitación pensé en que podría hacer con el otro, no es tan fácil mantener a alguien y menos cuando lo secuestras... en fin, me dirigí a mi habitación y solo llegué a dormir... 

A la mañana siguiente o mejor dicho en la madrugada me levanté para ver como había quedado el cuerpo de ese idiota, al entrar en el sótano un olor penetrante me envolvió, casi vomito... me cubrí la nariz y la boca y bajé hasta donde lo había dejado, la rata lo había atravesado de lado a lado,  el murió desangrado y con mucho dolor... salí del sótano y fui a despertar a Eveline, "SK; Anda, ya despierta, levántate,", "EV: Hmmm ¿A hora qué pasa Skarlet?", "SK: Nada, solo necesito que me ayudes con tu regalo", "EV: ¿Cuál regalo...? ah ese regalo, si ya voy...", "SK: Anda, ya levántate, no seas floja...", con mucho esfuerzo se levantó y me acompaño hasta el almacén donde estaba Mikael, antes de abrir la puerta le pedí que me trajera papel y pluma, "EV: ¿A hora qué quieres hacer Skarlet?", "SK: No preguntes, solo dame eso, ya veras", tomé la hoja de papel y la pluma y abrí la puerta , "SK: ¿Qué tal dormiste?", "MI: T...tengo frío", "SK: No te quejes, conforme cooperes te daremos ciertos beneficios, bien, ahora ten esta hoja y esta pluma, si quieres comer algo necesitaré que escribas una carta en la que dejes tu renuncia, bastante tengo con tener que dar una explicación de porque este bastardo murió, no quiero lidiar con más cosas, anda, escribe una carta de renuncia, tienes diez minutos... y cuidado con poner alguna tontería, la voy a revisar, si no quieres quedar como ese idiota será mejor que la hagas bien, ¿ Entendiste?", "MI: Ammm... si, lo que digas...", "SK: Vamos, te amenazo de muerte ¿y es lo único que dirás?", "MI: temo que si digo algo más tal vez termine peor...", "SK: Hmmm bueno, anda, ponte a escribir, vuelvo en diez minutos, Eveline, cuida que no haga nada indebido", me dirigí hasta el sótano, en un momento de inspiración sádica tomé una sierra y aguantando el olor comencé a cortar la cabeza del cuerpo... una vez que logré cortar la cabeza la saqué del sótano y la coloqué en una caja.

Para quitarme ese olor y la sangre subí a mi habitación para darme un buen baño y arreglarme un poco, terminé de arreglarme y bajé a donde había dejado a Mikael, "SK: Bien, al final he tardado un poco más de lo que dije, bien, ¿Ya terminaste la carta Mikael?", "MI: S...si claro, ten mírala", la comencé a leer y en grandes rasgos decía que renunciaba por la ola de asesinatos recientes y por problemas de salud...nada fuera de lo normal... "SK: Bien, Eveline, dale algo de comer... no, mejor tráelo a la mesa, quiero preguntarle unas cosas", "EV: Si, está bien, ¿No importa que le dé lo mismo que nosotras y que le consiga un poco de ropa?", "SK: No me importa que coma, y Eveline, hazle lo que quieras, es tu regalo, solo no te encariñes, sabes que si hace algo indebido lo mataré",  caminé hacía el comedor, y me senté Eveline nos sirvió de comer y se sentaron Mikael un poco nervioso miraba la comida, tenía miedo por lo que le dije, "SK: Anda, come, no está envenenada si es lo que crees", tomé una cucharada grande del caldo y me la comí, "SK: ¿Ves?, no pasa nada, anda come antes de que me arrepienta y te vuelva a encerrar", el tomó un poco del caldo u comenzó a comer, de poco en poco hasta que en un impulso de hambre, como si el no hubiera comido nada en bastante tiempo comenzó a comerse todo de una manera muy rápida, Eveline y yo solo lo mirábamos un poco sorprendidas... me recordó a esa vez... cuando pasé hambre y frío, antes de que me llevaran a ese maldito orfanato, mientras Eveline y yo comíamos le comencé a hacer unas cuantas preguntas... 

"SK: Bien Mikael, dime, ¿Cómo es que llegaste a trabajar en esa casa...?", "MI: Ammm bueno...", "SK: Vamos, responde o te dejaré sin comer", "MI: S...si está bien, yo llegué a esa casa cuando comencé a buscar un trabajo para poder mantener a mi madre pero... cuando ella murió decidí quedarme aquí, la verdad es un poco difícil para mi hablar de eso...", "SK: Descuida, no me interesa eso por el momento, dime, ¿Sabes donde puedo encontrar algo de información sobre el y su familia?, necesito que me lo digas, hoy quiero hacer algunas cosas en esa casa", "MI: Amm no se si sea buena idea que te diga, yo...", "SK: Vamos, dímelo!! no olvides que que debes de cooperar al no ser que quieras terminar como los demás...", "SK: N... no, está bien... te lo diré, puedes encontrar más cosas en el despacho del señor, ahí en el librero tiene unos documentos, están en la parte donde guarda las fotos o cosas personales...", "SK: Hmmm bien... los voy a buscar, si me estas mintiendo la vas a pagar con tu vida, ¿Lo entiendes verdad?", "MI: S... si, créeme no te miento es la verdad", "SK: Ya lo veremos...", terminé de comer y agradecí la comida, y tomé la carta de renuncia de Mikael, tomé una bolsa y en ella coloqué la cabeza decapitada de ese maldito perro e hice una pequeña nota que simplemente decía, "Cuídate sigues tu", caminé hasta la puerta de mi casa y antes de salir le dije a Eveline, "SK: Eveline, cuídalo, si hace una tontería yo me encargaré de el".

Serré la puerta y comencé a caminar hacía la casa de ese maldito, al llegar lo primero que hice fue colocar la cabeza de su pobre hermanito en la puerta de la casa y también dejé la nota que hice en su boca ensangrentada, seguido de eso solo entré a la casa y subí con calma al despacho de ese maldito, dejé la nota falsa de Mikael y me fui a acostar en un cuarto vacío a esperar...

Nada personalDonde viven las historias. Descúbrelo ahora