Capitulo I

6 0 0
                                    


3:00 a. m.

Me desperté después de una pesadilla, mire la hora, ya era la tercera vez que me levantaba por el mismo sueño del hombre con traje blanco. Decidí levantarme a tomar agua, puedo escuchar que está haciendo mucho viento, antes de salir de mí habitación veo por la ventana.

—No hay nada —Me dije a mi misma para tranquilizarme un poco.

Estaba bastante nublado. Camine en dirección a la puerta, salí de mí habitación y baje las escaleras, camine a la cocina, al abrir la nevera siento un escalofrío que pasa por toda mi espalda y me pone en alerta. Volteo de inmediato al sentir una mirada punzante en mi espalda.

—¿Mamá? ¿Papá? —Pregunte desesperada.

—Shhh —Un susurró se suena en toda la casa.

—¿Quien esta ahí? —Pregunto para aclarar mis dudas, me sentía una mala presencia al rededor, al ver por la ventana veo una silueta... Era un hombre contraje blanco. Rápidamente me di la vuelta agarre el vaso con agua lo tome en momento de desespero y cierro de vuelta la nevera. Al darme la vuelta ya no había nada ahí.

—Supongo que fue mi imaginación —Susurro para sentirme bien conmigo mismo.

Empece a subir por las escaleras cuando siento una mano fría que me arrastra y me hace caer, estuve a punto de gritar una mano con un guante blanco me tapo la boca.

—Tranquila Sara —Susurró el hombre que en su traje tenia una linea roja, no tenia idea de como sabia mi nombre.

Trate de luchar pero era muy fuerte, su cara era deforme tenía quemada la mitad. Veo como mete su mano por dentro del traje y saca un tipo de jeringuilla.

—Solo sera para probar algo en ti pequeña —El hombre sonrió.

Vi como lentamente introdujo la jeringa en mi pecho y soltó el liquido, sentí como si mi sangre quemara, era un dolor increíble trataba de gritar, pero el hombre no me soltaba, sentí como todo se empezó a nublar hasta que ya no sentí ni vi nada.

1:00 p. m.

Me despierto miro al mi alrededor y estoy en mí habitación, me calme mucho, lo más probable es que era otro sueño.

—¿Sara? —Grita mi mamá mientras toca la puerta.

—¿Si mamá? —Pregunte emocionada al saber que todo era un sueño.

—¿Hija por que no has salido del cuarto en todo el día? ¿Te sientes bien? —Pregunta mi mamá con un tono de preocupación.

Esas ultimas palabras me impactaron, pensé que era las 7 o 8 de la mañana, vi la hora y me di cuenta que era demasiado tardé, mil preguntas se forman en mi mente.

—¿Hija? —La voz de mi mamá me saca de mis pensamientos y recaigo en la realidad, tengo que pensar una excusa rápida.

—Mamá es que ayer haciendo algunas cosas me acosté muy tarde —Trato de levantarme de la cama pero siento una debilidad en mis piernas y me caigo de lado.

—¿Iras al evento de tu escuela? —Pregunta mi madre con un tono que se escucha más calmado.

—Eh si —tuve que mentir no recordaba para nada el evento de la escuela, me agarre de las paredes para levantarme y abrirle a mi mamá.

—¿Segura que estas bien hija? estas muy roja —Al verme la cara su rostro cambio.

—Si estoy muy bien mamá, iré al baño y de ahí bajo por la comida —le dije tratando de parecer sana.

Mi mamá afirmo con la cabeza y bajo. Mis de piernas un momento a otro recuperaron estabilidad, Todo transcurrió normal hice todo lo que hago siempre, me arregle para partir ya eran las 2:30 y faltaba media hora para el evento de la escuela, mi papá me llevo.

—Otro día de mierda —Pensé al despedirme de mi papá, el evento no había comenzado, se supone que era para festejar que la escuela gano un premió deportivo o algo así, pero junto con que la escuela cumple 20 añose hicieron una fiesta muy extravagante

—¡Hola Sara! — Un grito retumba mi cabeza, era la voz de Carolina, quien me recibió con un abrazo.

—Carolina no vuelvas a gritar así por favor —Le dije de mal humor.

—¿Te paso algo? —Pregunto mientras me veía a los ojos fijamente—. Tú no sueles ser así conmigo.

Me preocupé más por mí y no me fije en que lastime a Carolina al ser tan dura.

—Lo siento solo es que hoy no es mi día, entremos —Trate de solucionar lo que hice con unas palabras, la jale por un brazo para entrar a esperar que el día pase rápido

No fue para nada así, en momentos escuchaba pitidos en mi cabeza, susurró, sentía que me estaba volviendo loca, nos llevaron al gran salón de la escuela, me empece a sentir muy mal por todo lo que había comido supongo.

—¿Me acompañas al baño? — Mire a mi amiga fijamente y ella vio en mis ojos rojos lo mal que me sentía.

—Claro vamos rápido —Dijo ella jalandome por un brazo.

Encendieron las bocinas mi mente empezó a retumbar y mi estomago también, llegue al punto de vomitar todo.

—¿Sara? — Escuchaba la voz distorsionada de muchas personas y sentía como me debilitaba. Que me estaba pasando, empece a recordar mi sueño ¿sera realidad? mis ojos se empezaron a perder la batalla e iban descendiendo lentamente hasta el momento en donde caí y lo ultimo que escuche fue un estruendo y unos gritos.

N/A: Holaaa gracias por leer mi historia, les prometo que estará mas interesante, me gustaria que me ayuden con su apoyó y dejando su estrellita.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Apr 14, 2020 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Línea Muerta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora