I'll Follow You Into The Darkness

¡Hola! Antes de empezar a leer, quiero hacer énfasis en que esta historia está inspirada completamente en la obra "Before The Darkness Eats Me" por GalaxyWaifu (a quien quiero agradecer con todo el corazón por apoyarme en todo momento para la elaboración de este escrito), así que es absolutamente necesario pasarse por su historia para entender el contexto.  Este es el link: www.wattpad.com/478675867-before-the-darkness-eats-me-richie-x-reader-before.

Fue escrita por la necesidad de encontrar una salida a el corazón roto de Richie Tozier y de todos los lectores por una pérdida tan inesperada.  

Sin nada más que decir, espero que la disfruten <3

Un zumbido resuena en mis oídos de pronto, a la vez que un escalofrío recorre mi espalda y me deja completamente helado. Tengo que dejar de pedalear inmediatamente y detenerme con mi pierna derecha para no caerme, un mareo le prosigue y tengo que cerrar los ojos para controlarlo.

-No es real, Richie-mi mente recrea las palabras que Bill me dijo aquel día y dejan un eco estruendoso en mi cabeza. Puedo sentir mi boca seca y, a pesar de que el sentimiento de que algo mira mi espalda me produce un terror inmenso, me niego a abrir los ojos. Me rehúso a aceptar que lo que siento es real.

-Nada de esto es real- las palabras de Bill suenan en mi cabeza de nuevo, pero la voz que se produce es de Simone. Abro los ojos de golpe en cuanto escucho mi nombre a manera de una queja lejana, casi como si no hubiera sonado, como inexistente, pero claramente lo había escuchado. En mi cuerpo nació la necesidad de pedalear a todo lo que daban mis piernas, hasta que mis muslos se quemaran para llegar a la casa de Simone y saber que estaba bien. Me vi dando media vuelta mientras veía la calle que antes me parecía tan hermosa y tranquila, ahora como un pasaje a aceptar que todo lo vivido fue real.

Me vi llegando a la acera de su casa, donde hace unos minutos un Richie completamente ruborizado salía corriendo balanceando su mano lado a lado.

Me vi bajando y tocando a su puerta por la inmensa incomodidad que me provocaba el pensar que algo le hubiera ocurrido.

Me lo imaginé, pero no lo hice. Parpadeé regresando a la realidad. Despegué mis ojos del asfalto cristalino, obligándome a reprimir la ansiedad y empecé a andar con las piernas temblando y un terrible sabor amargo en mi boca.

Subo rápidamente a mi habitación, cerrando con llave. Me recargo en el pomo de mi puerta con los ojos cerrados. "¿Qué está pasando?" me pregunto una y otra vez hasta que la imagen de Simone sujetando mi mano entra fugazmente a mi mente. Puedo sentir el cosquilleo de su tacto distante y me tranquiliza un poco.

Esa noche no pude dormir; cada vez que cerraba los ojos un frío abrasador me envolvía. Incluso tuve el impulso de llamarla toda la noche y lo hubiese hecho de haber tenido su número. El techo de mi habitación lucía increíblemente grande y mi estómago exageradamente vacío.

-No es real, Richie- me susurré en la oscuridad. El temor de que no fuese mi imaginación jugándome una mala pasada era inmenso, pero el pensar en Simone herida o asustada me provocaba incomodidad, incluso más que el mismo día en el que vi al puto payaso. – Deja de ser un marica.

Me consolé un poco pensando en que estaba exagerando, la había visto hace unas horas, que se volvieron eternas. Y la necesidad de verla en la sala de ocio en unas horas me carcomía incluso más que otras veces.

Me levanté exageradamente temprano, me vestí y tomé una ducha rápida. No acordamos una hora para vernos, pero decidí estar ahí en cuanto llegara. No importaba el tiempo que tuviese que esperar.

Los besos de la noche anterior se mantenían debajo de mi piel en una sensación cómoda y cálida. Pero por alguna razón, el sabor ácido no dejaba de recorrer mi lengua, entrometiéndose en lo dichosos que se sentían mis labios.