Bonne Anné

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Las manecillas del reloj son un constante sonido, el tiempo reflejado en persona, la cual no llora por nadie. Cada día es testigo de nuestras hazañas, de nuestros errores y de cómo miramos atrás...

¿Qué es lo que dejamos atrás en el año nuevo? O qué es lo que comenzamos. ¿Cuál es su magia? ¿Qué hay sobre la esperanza? Tic, tac, toc, tic, tac, toc...

No leas la última página. Aférrate a los recuerdos, porque ellos te sostendrán, porque entonces yo podré sostenerte...

Está tomando su mano y la acaricia con suma delicadeza, mirando las marcas y contorneando sus delgados pero suaves dedos los cuales siempre estuvo contento de tomar. La temperatura de su piel era cálida después de todo y eso le reconfortaba su corazón.

Tantos años vividos a su lado, aún no quería que fueran abrazados por el final.

—Adrien... ya casi empiezan... deberías ir —le murmuraba Marinette buscando aquellas gemas esmeraldas tan vivas como la primera vez que las miró.

—No —se negó su compañero —me quedaré aquí contigo, y más te vale que no insistas.

Entre cada pestañeo se miraban borrosas imágenes de colores, observando luces en el cielo, cada una diferente en cada segundo. Observaban la sonrisa del otro mientras se abrazaban y pedían porque sólo fuera el principio de un largo capítulo de su vida.

Se miraron algunos instantes sintiendo como sus manos se rozaban y el silencio que ocupaba ese espacio que dejaban libre sus respiraciones. Él le ofreció una sonrisa para escuchar la cálida risa de su amada que aún expiraban sus labios.

Se recordaban el primer año pidiendo por ese beso especial, el primero que recordarían el resto de sus vidas. Recordaban tomarse cerca y unir sus labios, justo cuando todos los demás hacían lo mismo, pero nada cambiaría ese día, nada haría más especial su relación, más que pasar el día de año nuevo juntos...

—No estés triste, gatito... Estoy bien.

Él sólo pareció reflexionar aquellas palabras mágicas que siempre eran como un bálsamo que le hacían enamorarse más a pesar de su mayor edad.

—No lo estoy...— Él bajó la mirada tragando pesadamente su saliva. No quería que le viera llorar así que con disimulo acariciaba la pequeña piedra de aquel anillo que prácticamente portó toda su vida, orgullosamente, con amor y alegría.

«Podía verla mirando por la ventanilla del taxi molesta, podía recordar las emociones de un día anterior y lo cálido que amanecía la cama al día siguiente, estando tan cerca el uno del otro y contando chistes hasta el mediodía.»

—¿Recuerdas nuestro primer año nuevo de casados?

—¿La fiesta de Chloé? Cómo olvidarla...— respondió ella riendo un poco para toser después. Él se paró rápidamente para alcanzar un vaso con agua tibia, dándosela a beber. No pudo ocultar lo afligido en su mirada a lo cual Marinette se le rompió el corazón. "Es de mis años nuevos favorito" comentó una vez que pudo hablar.

—El primer día del año y ya estabas molesta conmigo —dijo Adrien mirándole con cierta diversión, Marinette sólo sonrió de lado.

«"¿Dónde está Chloé?"

"Se ha ido" respondió él rascando su nuca mientras caminaba.

"¿Cómo qué se ha ido? ¿Qué se supone que hagamos todo esto? ¡Tu padre nos matará!"

New Year's Day [MLB]Where stories live. Discover now