Todo se acabo...

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Patino, patino y patino más rápido, siento algo que nadie puede explicar, es un sentimiento muy fuerte dentro de mi.
-¡Hola papá!.- le respondí con una sonrisa de oreja a oreja.
-¡Hola hija! ¿porque vienes tan contenta Erika?.-Me pregunto mi papá
-¡Papá, papá..,!.- Estaba tan emocionada que ni siquiera podía hablar.
En eso mi hermano Lucas me interrumpe y para mi sorpresa tenía un golpe en el ojo que ni siquiera me podía escuchar mi papá .
-Lo siento hija pero tengo que atender a tu hermano.- Me dijo mi papá con un tono preocupado y triste a la vez.
-No te preocupes papá, ¿mientras puedo salir un rato con mis patines?.-le pregunté emocionada
-Claro que sí hija, pero llegas aquí a las ocho para cenar.-Me respondió.
La verdad era la única forma en la que me podría distraer, tenía unas muy buenas 2 horas para salir con mis amigos Marco, Luis y Katia.
En un chat que tenemos los cuatro...
Erika: Hola chicos! ¿Están?
Katia: Si, amiga ¿que necesitas?
Marco: Déjame adivinar Erika ¿patines?
Erika: Si, Marco como lo supiste.
Luis: Ay, Erika te conocemos tan bien!!
Katia: ¿A que hora nos vemos?
Erika: ¿qué tal en contra esquina de la tienda de don Lucho a las....6:15?
Marco: Perfecto, allá nos vemos!
Luis: ¡y no olviden sus patines!
Fin del chat...
La verdad es que una vez a Katia se le olvidaron los patines y estuvimos súper aburridos nosotros porque no teníamos con quien jugar, nuestro lema un poco raro y divertido es:
"Sin patines y sin los mas importante AMIGOS, no hay diversión"
Lo sé ni siquiera es un lema pero bueno.

Cuando llegamos todos con nuestros patines teníamos mucha hambre, así que fuimos a la tienda de Don Lucho a comprar unos refrescos y unos cacahuates.
Al terminar nuestros snacks, fuimos a un parque cerca de donde estábamos y al llegar vimos que había todo un grupo de chicos mayores que nosotros con unos patines profesionales. No nos asustamos ya que nosotros también sabíamos patinar muy bien y no nos intimidaban. Los chicos nos retaron al ver que sabíamos patinar igual o mejor que ellos, el reto era subir y bajar rampas en menos de un minuto. Para mi era fácil ya que siempre practico en unas rampas que tengo en mi casa, pero en cambio Marco era muy malo en bajar las rampas ya que se caía fácilmente.

Marco como quiera intento bajar las rampas pero cuando iba bajando se tropezó y se cayó. Todos los chicos se empezaron a reír excepto Michael un chico muy lindo, era el mejor patinando y se veía que era muy simpático.
Se acercó a mí y me preguntó que si quería salir con el por un helado al que obviamente le respondí que si (sinceramente quién iba a rechazar esa propuesta). A Luis no le pareció y ya se porque, hace tiempo me dijo Katia que yo le gustaba y no me lo quería decir.

Al terminar la salida con Michael me regrese a mi casa porque ya mero iban a dar las ocho.
Al llegar mi mamá y papá se veían preocupados y solo me acerqué a ellos para saludarlos, cuando ya iba para mi cuarto mi mamá me dice:
-Tenemos que hablar...

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