Historias del destino

Prologo

"Persona hablando"

"(Pensamiento de la persona)"

"Demonio, Bijuu, Invocación, Ser sobrenatural hablando"

"(Demonio, Bijuu, Invocación, Ser sobrenatural pensando)"

XxxXxxX

Prologo

XxxXxxX

¿Dónde estaba? Realmente no lo sabía, me sentía dormido pero podía ver y moverme perfectamente, estaba viendo a mi alrededor una sola cosa, muerte, gente huyendo por sus vidas de lo que parecía ser una luz, las personas que dejaban de hacerlo eran consumidas por ella, luego el lugar cambio al mar, con cientos de barcos de lo que parecía ser una isla, para abruptamente despertar, sin duda alguna estaba en la cama de un hospital.

Mi nombre es Naruto Namikaze y el hijo mayor del cuarto Hokague Minato Namikaze "El relámpago amarillo de Konoha" y Kushina Namikaze "La habanera sangrienta", tengo la edad de 8 años, pero... No sé si debería tener ese nombre, mis padres jamás me han puesto atención, toda esa atención se la han dado a mis dos hermanas, Kaori y Midori Namikaze, "Las princesas de Konoha", todo el pueblo las tienen en adoración, en mi caso las personas que me aprecian pueden ser contadas con los dedos de una mano, las primeras personas son Teuchi y Ayame Ichiraku, padre e hija respectivamente, tienen un puesto de ramen llamado igual que su apellido "Ichiraku", la tercera persona es una mujer llamada Mikoto Uchiha, es una amiga de mi "madre" que cuando viene de visita siempre se toma su tiempo para platicar conmigo, además de que me da dulces de vez en cuando, y la última persona es mi Jiji Hiruzen Sarutobi, él fue el primero en darse cuenta de mi situación y por ello me enseño bastantes cosas, a cocinar, leer, escribir y me daba cada vez que nos veíamos dinero para lo que quería.

Pero volviendo al momento actual, me encontraba bastante confundido, no tenía ninguna idea de cómo es que pude llegar al hospital, estaba a punto de moverme pero me distrajo una voz, "Naruto, al fin despertaste", gire mi cabeza hacia el lugar de esa voz y vi quien era, Jiji, parecía aliviado de alguna molestia y claramente feliz.

"¿Jjiji?, porque estoy aquí?, pregunte con una duda creciente y curiosidad genuina, "Esa es igual una de mis dudas ¿No recuerdos que fue lo que te paso?", respondió el viejo hombre mirándome esperando una respuesta, moví la cabeza negando mi falta de recuerdos, "Vamos, trata de recordar has un esfuerzo", volvió a insistir el hombre

Mire hacia abajo tratando de recordar, y llegaron "Creo que me acuerdo" dijo en voz baja mientras su cara se torcía a una expresión de odio.

(FLASHBACK)

Era el día de mi cumpleaños número 8, realmente estaba emocionado, sus padres habían organizado una fiesta de cumpleaños para celebrar el cumpleaños de mis hermanas, bueno, eso no era lo que me emocionaba, lo que realmente me emocionado era que Jiji me dijo que me iba a regalar algo muy especial.

El lugar en el que se iba a llevar a cabo era la mansión del clan Namikaze era un lugar bastante espacioso, había decoraciones de globos de distintos colores y varios carteles diciendo "FELIZ CUMPLEAÑOS", ya habían llegado bastantes invitados y los que más destacaban eran los herederos de clanes, entre ellos estaban Shikamaru Nara, Ino Yamanaka, Choji Akimichi, Hinata Hyuga y por supuesto mis hermanas que jugaban en el patio a ser ninjas.

Mientras que yo estaba distraído al observarlos alguien me toco el hombro, era Jiji, "Feliz cumpleaños Naruto" me dijo con una sonrisa y me dio un abrazo, "Gracia Jiji" le conste, "Toma" dijo para darme un pergamino "Este pergamino contiene varias katas de taijutsu" siguió diciendo, "!¿Eso significa que vas a entrenarme?¡" pregunte casi gritándolo ilusionado, "Si Naruto ¿Cuando quieres que empe...?", "¿A qué se refieren con entrenar?", dijo una voz femenina interrumpiendo a Hiruzen claramente molesta, "Ho-Hola Mikoto-san ¿Como esta?", pregunto el nervioso anciano, sabía que era peligroso hacerla enojar, "Naaada solo venia aquí a felicitar a Naruto por su cumpleaños, un niño que no está en edad de esforzar su cuerpo a esos límites, Hiruzen-sama, ¿Realmente habla enserio de entrenarlo, el sigue siendo un niño, todavía tiene una infancia por delante", dijo Mikoto molesta y ¿Nerviosa?, "!Oh¡, casi se me olvida toma Naruto, espero que te guste", término de decir con una sonrisa y extendiéndole la mano al rubio con una pequeña caja negra, para luego seguir discutiendo con el viejo hombre, la caja tenía una pulsera de plata y un cristal de cuarzo de decoración, una joya muy hermosa realmente.