Sting.

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Las últimas semanas, Jesse se encontraba raro, ya no era como antes. Era cariñoso, atento y amable, pero ahora no me daba atención, no era atento y no me daba amor como debería hacerlo.

Hoy iría a hablar con él, ya que decidimos darnos un tiempo hasta que él se diera cuenta que estaba mal, yo lo seguía amando, y demasiado, pero temía que el ya no a mí. Nos conocíamos hace mucho tiempo, y lo último que esperaba es que de la nada me dejara de amar, sin ninguna explicación, era mi mayor miedo.

Entré a mi auto y maneje al hotel en el que se estaba quedando temporalmente, ya que estaba de gira y solo tenía cinco o tres horas de descanso, las cuales, antes, las pasaba conmigo. Llegué luego de unos largos minutos, maldije al haber tomado la autopista con más tránsito, bajé del auto y entré al lujoso y caro Hotel, pedí el número de su habitación y subí al ascensor.

Estaba nerviosa, algo me decía que no debería estar ahí, que debía alejarme rápidamente del establecimiento, lo pensé un tiempo pero era tarde, el ascensor se detuvo, dándome a conocer que había llegado a la planta más alta.

Suspiré y salí, caminé temblorosa a la habitación 24, y cuando llegué a la puerta, la miré por unos segundos.

—Te vas a arrepentir si la abres.— Una voz apareció en mi cabeza, se me puso la piel de gallina, quizás esa voz estaba en lo cierto.

Me alejé rápidamente, pero le detuve, ya estaba aquí, y si tenía ese presentimiento, ese nerviosismo, no era porque todo estaba bien, algo andaba mal y estaba dispuesta a descubrir que era esa gran preocupación.

Tomé la manilla y sin volver a pensarlo la gire.

La voz tenía razón, me arrepiento de no haber salido de ahí.

Un Jesse Rutherford y una Devon Carlson, en una apasionada escena, teniendo sexo en la cama que yo solía dormir con Jesse, mis ojos rápidamente se llenaron de lágrimas y mi garganta tenía un enorme nudo.

Jesse dejó de lado a Devon, para mirarme con sus hermosos ojos muy abiertos.

—Margoth, no, esto no es lo que parece.— Mintió mirándome a los ojos. Yo reí sarcásticamente.

—Oh, ¿Me vas a decir que esto es mentira?— Cerré fuertemente la puerta y corrí al ascensor, no quería volver a verlo nunca más.

Llegué al ascensor y un río de lágrimas mojaron mi vestido, vi a Jesse salir de la habitación solo con pantalones, se dirigía rápidamente a mi, pero justo el ascensor cerró sus puertas, dejándolo ahí afuera.

Mi llanto se hacía casa vez más intenso, no podía creerlo, ¿Por qué?

Llegó abajo y salí casi corriendo, Rutherford bajaba las escaleras y al verme comenzó a perseguirme.

—¡Alejate de mi, no quiero volver a verte!— Grité mientras subía a mi auto.

—¡Margoth no es lo que parece, por favor escúchame!— Gritó mientras movía sus manos. Arranqué el auto sin importarme nada, mi vista se volvía borrosa por las lágrimas, mi corazón latía cada vez más rápido y mis ganas de morir eran ya enormes.

Te maldigo Rutherford, me dejaste caer cuando más te necesité.

   Fin. 

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⏰ Última actualización: Dec 22, 2017 ⏰

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$TING ||One-shot Jesse Rutherford||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora