Mi Linda Lectora.

75.[Narrado]

Ya había llegado la medianoche y nos dimos la Feliz Navidad Ely y yo,estábamos sentados en la nieve mirando las luces de la ciudad junto con aquellos fuegos artificiales tan bonitos llenos de varios colores.

-Son tan bonitos.-respondiste sonriendo-

-Pero no más que tú.-conteste mirándola entonces noté un pequeño sonrojo.-

-Te vez hermosa así cariño.-besé su mejilla-

-Basta Moisés me sonrojas.-respondió ocultando su cara en sus manos.-

Sólo reí y quité sus manos de su rostro,las entrelacé con las mías y acerque mi cara a la suya lentamente sin despegar mi visión de sus tan tentadores labios me detuve cuando estuve apuntó de besarlos.

-Feliz navidad Ely.-comenté sonriéndole acariciando su mejilla-

-Feliz navidad Moi.-contestó antes de darnos un beso.-

Empezó hacer más frío entonces nos tuvimos que separar,le dije a Elena que se cubriera los ojos porque le daría una sorpresa,caminamos unos segundos y nos detuvimos,aparté las manos de los ojos de ella lentamente.

-¡Qué linda cabaña Moisés!-exclamó mirándome muy feliz-

-Entremos.-finalicé tomándola del la muñeca entrándonos-

La cabaña era de un amigo que me la vendió a un precio muy bajo,estaba en malas condiciones,pero con el paso del tiempo mi familia la fue arreglando y quedo mejor, con una habitación un baño,una sala y una pequeña cocina y tenía una buena vista a la ciudad.

-No merezco tanto de ti Moisés.-me sonrió apenada-

-No digas eso princesa,te mereces todo por darme la felicidad que no tendré con otra persona.-respondí abrazándola-

Sentí como comenzó a temblar,pero me di cuenta que todas las ventanas estaban cerradas y la puerta también,la acerqué a la chimenea para que tomará un poco de calor,me fui a la cocina a hacer un poco de chocolate.

-Ten.-comenté dándole su chocolate-

-Gracias.-soltó un suspiro-

La abracé fuerte y ella se acurruco en mi pecho,ella aprovechó ese momento y nos tomamos varias fotos,aún temblaba de frío y me seguía preocupando pensé que podía estar enferma por quedarnos tanto tiempo allá fuera.

-Me siento fría por dentro.-susurró bajo pero la escuché-

-¿Quieres que te caliente?-pregunté en su oído-

Noté que se sonrojo,seguro pensó lo mismo que yo.

-Pervertida Elena.-le comenté por lo que se avergonzó más-

-Yo sé que lo deseas ¿quieres?-pregunté mirándole pícaro-

Ella asintió.

La cargué hasta nuestra habitación y la dejé delicadamente en la cama,después de unos segundos ya ambos nos encontrábamos semidesnudos,le quité su parte de abajo y ella quito con desesperación la mía,di varias embestidas dejando que la habitación llena de gemidos por parte de los dos.

Nos tapamos con las sabanas y acurruqué su espalda contra mi pecho rodeando mis brazos en su desnuda cintura,besé su cuello antes de caer rendido a su lado.