El título de la historia dice que nunca la leerás y sin embargo, aquí estás.
Te atreves a desafiar la instrucción que se te da y eso me parece ofensivo, no eres más que insolencia, insolencia personificada.
Gracias a lo que hiciste, el título de la historia que quiero contar es ahora una mentira, me has quitado veracidad.
Me causas repulsión, asco, odio.
Pero no todo en tu insolencia es negativo... Si el pequeño Thanet hubiese sido igual de insolente que tú, seguiría con vida.
Déjame contarte un poco de el...