Capítulo 1

1 0 0
                                    

Lo que hoy en día conocemos como las bases de la sociedad ; La religión , la cultura , son mitos creados por el hombre para llenar el vacío de las preguntas sin respuesta, el ¿Por que? Y el ¿Como? De nuestra existencia, por mantener un régimen y cierto miedo a conocer y hacer más de lo que ya sabemos, a ser diferente al resto...

...Personas rechazadas y tachadas de Anormales solo por tener pensamientos diferentes, nos hace darnos cuenta de las inconsistencias de la Biblia y la religión como tal, donde cuentan que los homosexuales y liberales son malas personas que están destinadas a quemarse en el fuego eterno, mientras que en otras partes habla sobre como Dios nos ama a todos por igual y perdona nuestros pecados.

¿Ser homosexual es un pecado?...

...Suelo preguntarme eso todos los días, al mirarme al espejo de mi fría habitación, donde el reflejo me muestra la imagen demacrada y triste de lo que no quiero ser.

En el pasado me negaba a creer que me gustaban los chicos , reprimiendo, para no sucumbir ante el pecado y de ser lo que mis padres llaman "aberración", con miedo de que con un paso en falso puedan saber mis anhelos.

Crecí rodeado de normas y de limitaciones, preocupandome por el que dirán los demás, un completo temeroso de lo desconocido, mi padre, pastor de la iglesia y mi madre educadora en la iglesia para la clase de catecismo*, su amor a Dios y su respeto por la iglesia es más grande que su amor por cualquier otra cosa.

Como es posible que alguien como yo, pueda pensar así de una religión, cuando nací siendo parte de ella.

Desde que era pequeño me sentí diferente a todos los demás niños "varones", los veía jugar fútbol y gustarles las niñas, pero a mi no me gustaban las niñas, yo quería ser una niña, usar los lindos vestidos rosa pastel, zapatillas con brillitos y las tiaras que mi hermana EunSun solía llevar, siempre envidiaba que ella si pudiese jugar al té, mientras que yo, lo tenía prohibido.

Tenía 7 años cuando se me ocurrió confesarle al padre de la iglesia mis deseos, en ese momento creí que el era el único que me entendería al ser un hombre de dios, pero este les contó todo a mis padres y de una forma brutal me golpearon hasta hacerme saber que estaba mal y desde ese momento el pequeño niño que deseaba ser niña dentro de mi, tuvo temor, temor a ser un monstruo, a pecar y de no ser aceptado por dios y por los que me dieron la vida .

Y como a mi verdadero yo, tengo recluido mi corazón en una caja musical, donde una pequeña bailarina yacía sin poder danzar, no me permití ser quien quería ser, siempre bajo la mascara de buen hijo y estudiante, siempre correcto y con temor a hacer algo mal, llevando mi crucifijo como un grillete que me recordaba cada segundo, hora y día, que era infeliz.

Suelo escuchar que la religión llena los vacíos de tu alma, pero eso no aplica en mi, soy como una mariposa sin alas, como los animales cautivos de un circo, aquel circo en el que mi vida se había convertido, solía rezar y suplicar a dios por ser normal, solía sentirme un pecador, llevando conmigo una cruz, y el miedo de que en cualquier momento las personas notarán el Estigma* que llevaba tatuada en mi piel con mis propias lágrimas, las ganas de vivir se escapaban como la arena entre los dedos, pero ahí estaba el, Jungkook , mi mejor amigo desde los 10 años, nos conocimos en misa ya que su familia al igual que la mía es devota, el fue el único que se acerco a hablarme con su deslumbrante sonrisa, de quien me enamore pérdidamente.

Me encuentro sentado en posición de lotto dentro de mi armario, frente a una gran caja purpura, debatiendo entre ceder o no, una gota de sudor recorre de un costado de mi cara hasta mi mandíbula , mis manos tiemblan, mis respiración es agitada, llevo mis dedos hasta la tapa de dicho objeto y la deslizo suavemente hasta un lado, paso mi lengua por mis labios nervioso al ver el contenido, y con delicadeza retiro el femenino vestido de satín color salmón y los zapatos marfil de tacón, me levanto de mi lugar y abro uno por uno de los botones de mi odiada camisa formal azul rey, desato mi cinturón marrón y por ultimo mis holgados pantalones de vestir caen al suelo, pasando por sobre mi cabeza la tela, entro en el delicado vestido, paso mis manos por este eliminando las arrugas inexistentes, quitando mis horribles mocasines y mis calcetines me calzó los tacones, cojo un pequeño espejo de mano y aplico un suave eye-liner negro, también un poco de brillo labial ligeramente rosa, paso las manos por mi cabello negro colocando mi pequeño flequillo hacia delante, mis ojos se encuentran con una tiara blanca de encajes que mi hermana me compro a escondidas, hace algunas semanas, y posee pequeños mechones de cabello azabache sintético , la coloco sobre mi cabeza.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Oct 29 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Love Yourself - KookminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora