un amor de cristal

"Tú eres mis veintes"

Narra Elsa

han pasado ya, 12 años luego de la primera visita de Jack, no e vuelto a verlo, así que supuse que se había olvidado de mi real existencia, e vivido una vida algo triste, donde solo la presencia de mis padres llegaba a iluminarla...Pero, mis padres murieron hace 1 semana en un accidente donde se hundió el barco donde se encontraban, admito que no estaba lista para que algo así ocurriera, tengo miedo y a la vez me siento ansiosa, admito que los extraño mucho, ya que fueron mi único apoyo, ellos fueron la única luz en mi oscuridad...hoy van a coronarme estoy muy nerviosa, tendré que quitarme los guantes y puede que mis poderes se descontrolen, "si le hago daño a alguien?" era lo único que rondaba por mi cabeza, esa pregunta asesina y bien formulada, hecha con razones y muchas probabilidades, pero, no puedo negarme, Anna no esta lista para ser Reina, yo debo tomar esa responsabilidad...cuando miro por mi ventana para ver el amanecer, el momento en que debo salir, superar mis temores, veo que algo se acerca a gran velocidad hacia mi, sin que me diera tiempo a reaccionar cayo sobre mi y pude ver que era lo que me tenia acorralada en el piso, Jack...Oh por Dios, estuvimos en esa posición exactamente 8 segundos mirándonos fijamente a los ojos, escuche algo caer y pude reaccionar, me sonroje al instante y, al parecer el también lo hizo, por lo cual nos separamos nerviosos y con los corazones a mil por hora.

- Jack - sentí como lagrimas empezaban a derramarse de mis ojos, como resbalaban por mis mejillas, y como una sonrisa se formaba en mi pálido e indiferente rostro, que casi siempre se encontraba neutro- te extrañe tanto- admito mirándole a esos hermosos ojos brillantes que poseía-

- No llores - Sonrió mirándole con una tierna sonrisa, acercándose y acariciando levemente las mejillas de la menor, limpiando con delicadeza cada fría lagrima que caía de esos ojos que se asimilaban a las gemas, a unos bellos zafiros cristalinos- yo también te extrañe - le abrazo de la cintura mientras escondía su rostro entre el cuello y el hombro de la de cabellos pálidos-mas de lo que imaginas.

- "es el momento"-Penso la reina mientras armándose de valor, logrando separar un poco al mayor, se le acerco lentamente cerrando sus ojos y susurrando sobre los labios, del muy sorprendido guardián un dulce- Me gustas...-Y en ese momento le beso, lenta, apasionada y tranquilamente, transmitiendo todos los sentimientos que habían almacenados en su interior, todas sus verdades-.

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NOTA/Autora: En esta historia a Elsa la coronaron a sus veinte años.