¿Solo es un sueño?《Shizaya》

Última noche.

Shizuo caminaba sin rumbo por una calle vacía, sin pensarlo, se encontró con la persona causante de sus caminatas a las oscuras de la noche, esa misma persona que no podía sacar de sus pensamientos desde hace unos días.

Ambos se miraron sin ninguna expresión, esperando a que el contrario tomara la iniciativa de alguna conversación, Izaya avanzaba hacia Shizuo, cortando con esos metros de distancia que los separaban, para finalmente quedarse frente a frente con Shizuo.

- Y ahora que... -Izaya lo miraba con cierto resentimiento, esa apariencia inexpresiva ahora era una de tristeza, pena y melancolía juntas.

No obtuvo respuesta alguna del mayor, solo que ahora este tenía la misma expresión en su rostro, lo tomo del brazo arrastrándolo consigo, Izaya al principio puso resistencia, pero le fue imposible zafarse y se resignó a seguir sus pasos.

Shizuo lo llevó a su departamento para después, prácticamente, arrastrarlo a su habitación y lanzarlo a su cama.

Izaya sintió como su peso cayó sobre aquella cama ajena, para después sentir a Shizuo sobre él.

- No sigas con esto -dijo Izaya con una voz casi entrecortada.

Shizuo hizo caso omiso al pedido del informante, lentamente se acercó al rostro de Izaya, ambos podían sentir la respiración del contrario, sus labios estaban a escasos centímetros de rosarse, estaban a punto de probar este tentador fruto prohibido Una vez más.

Solo faltaban algunas horas para boda de Shizuo... si, la boda de Shizuo.

Dentro de unas horas Shizuo y Vorona se casarían, sin embargo, cuando debería ser el mejor día de su vida, Shizuo solo pensaba en ese día como el comienzo de una pesadilla de la que jamas podría despertar, el no poder casarse con la persona que realmente amaba, su único error fue no darse cuenta de ese sentimiento a tiempo.

Izaya no era la excepción en esta devastadora pesadilla, estaba en un compromiso impuesto por sus padres, él también, dentro de unos meses más se casaría con Namie, él también se casaría con alguien que no podía amar y de seguro jamas lo haría y por si fuera poco, también presenciaría la boda de la persona que ama.

Ambos solo podían mirarse mutuamente con toda la frustración del mundo en sus rostros.

- Izaya yo... -los dedos de Izaya se colocaron sobre los labios de Shizuo para que no continuara.

De seguro le iba a decir lo mismo de siempre, que no podía escaparse con él porque no quería traicionar la confianza que le ofreció la familia de Vorona; que Vorona lo amaba mucho y de seguro terminaría lastimada.

Esas misma palabras hirientes y despiadadas de siempre, ¿Dónde quedaba todo ese amor de Izaya? ¿A él si podía lastimarlo? ¿Sus sentimientos no importaban?

Shizuo se encontraba en una batalla con sus sentimientos revueltos, él sabía que no estaba siendo justo con Izaya, a pesar de eso lo consideraba de su pertenencia, se había encargado de que cada parte de ser llevara su nombre, pero y él... ¿Se consideraba de Izaya? Esa pregunta que lo tenía tan confundido, si se consideraba únicamente de aquel informante, ¿Cómo puede ser capaz de estar a punto de cazarse con otra persona? realmente era muy injusto...

Y esa noche iba a ser más injusto aún.

Se había vuelto esclavo de esa enloquecedora complexión del informante, de ese embriagador aroma que emanaba de su delgado cuerpo, de esos fascinantes sonidos que hacía, de los cuales él era el culpable.

¡Más injusto no podía ser!

Izaya no aguanto más y cruzó los brazos sobre el cuello del rubio para rápidamente juntar sus labios con los suyos, creando un tierno beso acompañado de algunas lágrimas saladas en el rostro del menor.