Capítulo 06: Súper mercado y robo.

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-“Mía. ¿Me perdonas?” –“Estoy confundida y será difícil confiar en ti, pero lo intentaré.”
Pensé que no lo lograría, me equivoqué de nuevo. El gesto de mi cara cambió muy rápido y el de ella también. Me mira directamente a los labios y se acerca lentamente a mí, en eso ella cierra sus ojos mientras se acerca y me besa una vez más pero esta vez sin remordimiento.
Se separa de mí y me mira a los ojos. Junta su frente con la mía, aun mirándome directamente a los ojos me dice. –“Mírame, de verdad me gustas, no sabes la sensación que siento al verte, no sabes cuánto tiempo estas en mi cabeza, realmente no sabes nada. Mírame, por favor, mira mis ojos, no hace falta decir palabra si mi mirada lo dice todo, te miro diferente, porque me gusta verte, disfruto tu rostro independientemente de la expresión que tengas, me gusta estar contigo sin importar el tema de conversación, me basta estar contigo para sentirme feliz.”
Si me gustaba, ahora me encanta. Siento que me estoy enamorando. Por un lado tengo miedo, pero por el otro quiero intentarlo. Sabes, no me dejaré llevar por mi mente y empezaré a confiar en mi corazón así me lastimen. Ella no es igual que Vella.
-“Mía. ¿Quieres ser mí novia? Prometo cuidarte y amarte.” –Rápidamente me abraza fuerte y besa mi mejilla. Yo junto su cuerpo con el mío, haciendo que estemos muy pegados. La beso tan lentamente que mi mundo se paralizó. Estoy seguro de que tendré la mejor novia del mundo la cual no me traicionará, ni engañará.
Mediante el beso escucho una voz a lo lejos llamando a Mía y ambos volteamos, estando aún muy pegados.
Me mira y de inmediato me separo de Mía, la mujer la cual está llamado a Mía, me extiende la mano y me dice –“Hola me llamo Peggy. ¿Tu cómo te llamas?” –“Me llamo Dereck y ya me voy, mucho gusto. Adiós.” – Ella es de ojos cafés, piel blanca, no es de estatura muy alta y viste muy fresca, su cabello está recogido en una cola, es rojizo y no es muy largo pero tampoco muy corto, le queda bien. 

Me retiro con toda la vergüenza del mundo. Volteo y atrás las dos se están riendo. No tengo idea de quién es, pero ella me cayó muy bien.

Ya en casa. Subo las escaleras para entrar a mi habitación y justamente mi papá llega.  uff que suerte la mía. –“Dereck. ¿Por qué estás tan arreglado?” –“Porque vamos al súper ¿No?” –“Cierto hijo, gracias por acordarme.” – Una vez más logré escapar de los regaños de papá.

Subimos al auto y nos vamos todos al súper. Mi papá en todo el camino solo cantaba y hablaba de política con mi primo. Son tan aburridos a veces me producen nauseas de tantas estupideces que hablan. Llegamos al súper y mi papá sale primero del auto, abre las puertas y salimos todos. Empezamos a caminar a la entrada del súper, reviso mi bolsillo y no está mi celular. Le digo a papá que mi celular se había quedado en el auto y me dirijo al lugar en donde está el auto, abro la puerta y el celular está en el asiento en donde estaba sentado. Salgo de ahí y está una persona, vestida totalmente de negro y con la cara totalmente tapada. Me mira y lo único que me dice es que le de mi celular con voz  grabe. Miro su mano y tiene un puñal.

Llamo a papá con fuerza y él me tapa la boca.

Delante de nosotros aparece una camioneta gris, que frena de manera exagerada por la velocidad en la que venía. De ella baja Peggy con un hombre alto y delgado, de piel blanca y cabello corto. Parece ser pareja de Peggy porque están agarrados de la mano. El hombre que venía en la camioneta, el cual está agarrado de la mano con Peggy grita. –“¡Suéltalo o no respondo!” – Esto lo hace mientras saca un arma de la cintura, el ladrón lo único que hace es correr. Peggy se acerca a mí y me abraza. –“¿Estás bien?” – Ella suena con mucha preocupación. Yo no respondo por los nervios.

Él le dice a Peggy que me deje tranquilo. Agradezco y el afirma con la cabeza. El que parece ser pareja de Peggy se acerca a mí y dice. –“Me llamo David. Cualquier cosa sabes que estamos a la orden.” – Agradezco una vez más y el responde de igual manera. Me despido de Peggy y ellos se van.

Me dirijo al súper, entro y mi papá está saliendo. –“¿Por qué tardaste tanto?” –“Nada papá, solo no lo conseguía.”

Nos dirigimos al auto nuevamente, subimos en él y mi papá lo puso en marcha para irnos a casa. Ya en camino, mi padre empieza a preguntarme si ya tengo novia, si aún soy virgen y que debo cuidarme.

Llego a casa y le pregunto a papá si puedo salir a casa de Mía y él se niega. Yo sigo diciéndole por mucho tiempo y lo único que dice es que no, que estoy castigado y que no saldré en un mes. Me dirijo a mi habitación y saco mi celular del bolsillo, veo que tengo un mensaje de Mía.

Mía: “Mis tíos me dijeron que iban a robarte, por esa razón te escribo. Estoy preocupada. <3”

Dereck: “Sí, lo iban a hacer, gracias a Peggy y a el hombre que estaba con ella no me robaron el celular.”

Mía: “¿Hoy puedes venir a mi casa? Estoy muy aburrida y quiero pasar tiempo contigo.”

Dereck: “Estoy castigado, pero igual le preguntaré a papá si me deja salir, te escribo cualquier cosa.”

***
Dereck: “Después de tanto rogarle a papá me dijo que sí. Ya voy para allá.”

Cierra chatt

Le aviso a papá que me voy y le agradezco por el permiso. Salgo de casa y le aviso a Mía que ya salí a su casa.

Llego a su casa, que no está tan lejos de mí casa. Llamo a la puerta y sale Peggy. –“¿Buscas a Mía? Ya la llamo.” – llama a Mía y ella sale de la casa. Me invita a pasar y entro a la casa. –“Voy a salir a la tienda.” – Dice Peggy y tras de ella salen dos niños, uno más grande que otro. Parecen ser sus hijos.

Ya dentro de la casa, Mía me invita a tomar asiento y luego me ofrece un vaso de agua, yo afirmo y ella se sienta a mi lado mirándome fijamente a los labios. Esta chica me encanta y tengo que admitirlo, cada vez que la veo me provoca besarla durante un gran tiempo sin dejarla.

La noche se fue en charlas de diferentes cosas, y ah, por supuesto muchos besos de por medio.

What do i do with my life?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora