Te has muerto Luis Jiménez
como minero el humo cavó tus entrañas
tus huesos insatisfechos se desvistieron de tu piel
Moriste un miércoles en la Esperanza
en tu cama
en tu finca
en tus condiciones
Contigo dentro como boca el ataúd cerró sus labios
la formalidad más importante que la tibieza tu pecho exigía marcha al sentido pésame y la herencia
Muerto de poco cabello y respetado te nos mueres otra vez
te sepultamos un jueves
te sepultamos nuestra memoria
y todos los días te sepultamos nuevamente.