el famoso cantante Jhon Wong ha llegado a su cuidad natal, esta vez, con la única intención de hacer explotar el lugar con su show, Jhon es conocido mundial mente, es aclamado por la gente, envidiado por otros, su forma de ser es agria, egoísta, e i...
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Girando un poco su rostro Mingyu alcanzo los labios de Wonwoo enlazándose en in profundo beso, las manos de este fueron bajando hasta las largas piernas de Mingyu para separarlas y colocarse entre estas, aunque tenía miedo y nervios Mingyu podía ocultarlo muy bien, aquella terrible posición la odiaba, pero por algún motivo se estaba acoplando, de esa vergonzosa forma Wonwoo no podía ver sus expresiones de pánico.
Desde atrás, Wonwoo pego su cuerpo al suyo chocando su miembro contra su tenso trasero, y con su mano comenzó a estimular su miembro.
-tal vez...el mío no sea tan grande como el tuyo...-susurro sobre su cuello. - pero sí sé qué hacer con el...- las extrañas sensaciones de algo duro contra él lo tenían nervioso, estaba excitado sí, pero temía lo que pasaría, nunca imagino tener sexo con un hombre, y menos ser el quien este abajo, pero con Wonwoo todo eran excepciones y sorpresas.
-tienes miedo? ...-dijo Wonwoo al ver las rojas orejas de Mingyu y sus brazos temblorosos.
-es...extraño...-
-y ahora lo será más...-aprovechando aquella distracción Wonwoo comenzó a posicionar su miembro contra Mingyu, sabía que sería doloroso o al menos eso pensó, pero al ver como Mingyu perdía su fuerza y ahogaba su rostro en las almohadas sonrió triunfante.
Había hecho esto un par de veces a jun, pero la sensación en ese momento era diferente, era Mingyu, y había dejado ser el quien estuviera de bajo, no podía sacar esa imagen de su mente, Mingyu sucumbiendo al placer que Wonwoo le daba, dejándole el control total de su cuerpo. Era tan caliente y estrecho que su cabeza comenzó a dar vueltas, era demasiado para él, y el cuerpo de Mingyu estaba totalmente rojo y su respiración muy entrecortada.
-Mingyu...te amo-dijo acercándose nuevamente a su oreja para aso darle ligeros besos.
-ya...sa...sácalo...- la voz de Mingyu temblaba mucho, no podía hablar bien, incluso pensar, tenía mucho miedo, se sentía tan extrañamente bien que le aterraba.
-ni siquiera me he movido...-con una mano Wonwoo atrajo su rostro para poder besarlo mientras con la otra se sostenía a sí mismo para poder moverse. Un extraño gemido que Mingyu emitió lo obligo a separarse de él. Al comenzar aquel vaivén Mingyu volvió a ocultar su rostro en la almohada y Wonwoo cerraba sus ojos dejándose llevar. Se santa tan malditamente bien.
-no...ya...y-ya...wo...won...Wonwoo- entre agitadas respiraciones Mingyu rogaba porque Wonwoo detuviera. Nunca hubiera imaginado ver a Mingyu en ese aspecto de persona asustada, y aquello le acaloro más, fue ahí donde comenzó a precisar sus movimientos en busca del lugar a donde quería llegar, si Mingyu ya estaba asustado esto le aterraría.
-no...n-no...- sin querer aceptarlo, e intentando contenerse el cuerpo de Mingyu disfrutaba sínicamente de la forma en la que Wonwoo se movía dentro de él. Tenía razón cuando dijo que sabía qué hacer, tal vez esto le ayudaría a aprender más, pero lo único que sabía era que no quería correrse así, de esa vergonzosa manera.
Wonwoo apresuro sus movimientos haciendo que Mingyu finalmente cediera, aunque él se negaba su cuerpo no lo hacía, había encontrado aquel lugar y comenzado a torturarlo. Sin darse cuenta el cuerpo de Mingyu también había comenzado a moverse contra su voluntad. Temblaba por la fuerza de contenerse.
-no puedes...solo...déjate llevar- dijo lascivamente contra su nuca para lamer aquella zona al compás de sus movimientos.
-eh...mmmm~~...- sorpresivos gemidos inevitables salían de su boca, su rostro lucia nervioso, apretaba sus ojos, su boca con mucha fuerza pero de repente los abría por la extraña sensación excitante. Sintió como aquel cosquilleo llegaba, no quería correrse de esa forma, pero no podía hacer nada para evitarlo, Wonwoo seguía tocando aquel terrible lugar, sabía que no escaparía, por lo que sin pensar más de dejo ir entre las acciones del otro, quien había agilizado el vaivén, también estaba sumamente excitado por lo que le bastaron unos movimientos más para saber que terminaría al mismo tiempo que Mingyu.
Una vez que ambos acelerados intentaban recuperar la respiración, Wonwoo comenzó a reír divertidamente.
-no creí que te dejarías...cielos...definitivamente te amo- molesto por aquellas palabras Mingyu se levantó rápidamente posicionándose sorpresivamente entre las piernas de Wonwoo.
-que...que haces...-al verse amenazado intento reincorporarse, pero era muy tarde Mingyu estaba sobre el sujetando sus muñecas fuertemente.
-te hare lo que yo quiera-
-el trato fue...si te gustaba o no...hice...hice que te corrieras...- nervioso e inquieto al darse cuenta que Mingyu ataba sus muñecas.
- eso no cuenta...es una reacción fisiológica inevitable, más si hacías eso...ahora prepárate. –
