Bueno hoy toca ir a clases y a quien engaño, no va a ver nada nuevo en el menú así que simplemente me pongo lo mismo que uso, digo si me gusta por que tendría que cambiar. Agarré mis Vans negros, unos jeans oscuros y un crop blanco.
Bajé agarré mi café y me fui caminando a la escuela, quedaba cerca así que muchos salían a la calle y tomaban dirección a clases, pero claro todos con sus amigos, en cambio yo era la única que andaba sola. En realidad no me culpo mantengo mi distancia con la gente simplemente son, como decirlo, muy diferente a mi. Las chicas solo están pegadas al celular contando chismes y tomándose fotos, creo que soy la única que siempre lleva un libro a la escuela. Los hombres, oh los hombres, sólo piensan en dos cosas: videojuegos y sexo, oye no los culpo quien no quisiera sólo preocuparse por eso. En cambio yo tengo que ver por mí y mi casa, mi madre nos dejó hace mucho tiempo y mi padre, se la pasaba todo el día en "El trabajo"... La cantina.
Claro que he intentado socializar, es más tenía una mejor amiga con la que hacía todo, lo único malo la cambiaron a una mejor escuela. En otro país.
¿Chicos? He intentado pero vaya que es difícil. Si no fuera por ellos no estarías leyendo esto.Con el que llegué más lejos habíamos quedado un día para ver películas, obviamente terminaría en una sesión de besos muy caliente, pero adivinen quien no consiguió nada. Resulta que un par de días antes empezamos a hablar y la cosa termino muy, pero muy fuerte. Tanto como para decir que podía tostar un pan si lo ponían en mi cara. El tipo empezó a mandar fotos de, como decirlo, su amigo, su gran amigo; yo en ese instante de extremo calor no pude contenerme así que aproveche del momento para utilizar mi mano (sí, las mujeres también lo hacemos) empecé a tocarme y no voy a mentir se sintió demasiado bien. Había visto en videos así que sabía dónde tocar, yo seguía mandando fotos de mi escote mientras me tocaba bajo las sábanas y el, acariciaba a su amigo del otro lado de la pantalla. Sentí que la cosa se ponía más húmeda así que baje aún más y metí mis dedos, era la mejor sensación de la vida, metía y sacaba mis dedos lentamente disfrutando cada segundo que pasaba, aproveche que mi padre no estaba para gemir tan alto como pude, era un Lacer intenso. Mi espalda se arqueaba, mis pezones estaban duros y no pude evitar tocarlos con mi otra mano, el placer de sumó y la cosa se ponía mejor y mejor, sin aguantarme más le mandé una foto de mi en mi mayor momento de calor y ahí murió todo, el no volvió a contestar y me quede sola justo después de haber terminado. Eso sí fue tan bueno que hasta mis piernas temblaron un poco al acabar
Más calmada y después de un tiempo me puse a analizar la situación y no sabía por qué lo había hecho, digo estoy buena y espero que el no haberme rasurado hace un mes no haya sido el problema. Sinceramente no soy fan de eso, pero bueno al menos disfrute de primera y única experiencia.
Y eso, ahí termino con los hombres, simplemente no tengo suerte, pero ya probaremos suerte ahorita te go que enfocarme en clases, que por cierto se me hacía tarde.
Como de costumbre dormí bien en la clase de César, el maestro de historia el cual solo le preguntas que desayunó y puedes perder fácil un módulo de clases con el. ¿Las demás? Como un día de preparatoria normal.
Me dirijo al comedor y como siempre la comida se ve asquerosa, parece el vomito que me hacía limpiar mi tía en vacaciones cuando iba a cuidar a sus hijos. Prefiero ir y llenarme con la deliciosa y engordariva comida de las máquinas expendedoras.
Tengo que decir que este año había mucha gente en la escuela y las mesas estaban llenas, gracias a Dios había una mesa, pero por sorpresa había un chico ¿Eso me iba a detener? No, una preza nueva, quien sabe podría ser algo bueno o terminar en la basura como los demás hombres que entran en mi vida. Estaba leyendo un libro mientras comía unas donas de la máquina, ¿comida chatarra y libro? Eso suma muchos puntos.
-Hola- dije con un tono muy serio, quería sonar desinteresada
Sólo levantó un poco la mirada y pude ver unos ojos muy bellos, sólo eran café oscuro, pero aún así me enamoré.
-Hola- dijo y el si sonaba desinteresado
-Eres nuevo- le dije. Que clase de comentario es ése, claro que es nuevo nunca había estado en la escuela.
-Oh gracias, o me había dado cuenta- dijo serio, pero ni el mismo pudo contener su risa.
Ambos terminamos lanzando una pequeña y boba risa. Tenía unos dientes perfectos, balnco y alineados. En sus mejillas se le formaban oyuelos
-Soy Kirsten- le dije y extendí mi mano a modo de juego
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La Historia De Kirsten
RomanceEs una historia de cómo la protagonista, Kirsten, se desarrolla con la sociedad, en especial con los hombres. Buscando algo más que solo una amistad. Está historia no es puro romance ya que incluye partes explícitas de momentos eróticos de la protag...