Odia llevar sus libros alrededor, sus libros torpes y rancios que huelen. Él lucha con ellos, con el volumen extra de la misma, modificaciones para que sea más fácil para él, braille golpeando a lo largo de sus dedos, palabras que permanecen en sus labios.
A veces son demasiado pesados, cuando tiene sus días largos, demasiadas clases juntas y libros gigantes sobre teorías con baches que necesita aprender.
Ji Ho los arrastra por el campus, tratando de mantenerse al margen de la gente, dando vueltas alrededor de obstáculos, personas que corren a sus propias clases. Él puede escuchar la desesperación mientras sus pies tocan tap tap tap en latidos rápidos, llegando tarde sin esperanza de llegar a tiempo.
Se pierde en su propio mundo, la mente corre hacia lugares que cree que son reales, que él podría ver. Ji Ho hace sus propios colores, remolinos de lo que él piensa que son agradables, rosados y morados, amarillos. Él conoce los colores, la teoría de ellos, pero solo puede darles su propia imagen.
Se pregunta si los colores son tan magníficos como él los convierte en realidad, si son tan audaces, tan bonitos, tan ardientes como los más profundos en los pliegues de su mente.
No hay pasos para respaldar a la persona con la que choca, choca contra un calor sólido. Él es el que está en desventaja aquí, pierde el equilibrio, tropezando cuando su mano deja caer sus libros.
Él nunca se cae, hay cálidos dedos yendo por su muñeca, suaves y acogedores, tirando de él hacia arriba. Está aturdido, gana terreno, intenta agacharse para buscar sus libros, pero la mano en su muñeca lo detiene.
"Hey, ¿Estás bien?".
Ji Ho asiente lentamente, a veces olvida que puede hablar, está tan atrapado en su propio mundo que olvida que hay un mundo cerrado para él, que todavía tiene una presencia en él, incluso si no puede ver.
"Lo siento, déjame ayudarte".
Son sílabas que gotean miel, tonos dulces, pesados y pegajosos. Se hunde profundamente en su estómago, cubriéndole las tripas, corriendo por sus venas. Es agradable, suave y fuerte, temblando hasta los huesos. Ji Ho tiembla con él, la forma en que lo envuelve por completo. En esta sensación de protección, calidez, algo que simplemente se siente bien.
Puede sentir los ojos en él, taladrándose, buscando algo, una indicación, ira, tal vez incluso un destello de vida. Ji Ho nunca ha podido ver eso en nadie, sabe que tampoco lo tiene en él.
"Siempre he querido aprender a leer braille." Dice, lento y constante como si temiera asustar a Ji Ho, "¿Es difícil?."
Se ríe porque es una pregunta estúpida, se ríe porque no lo es, es lo más fácil de todo lo que ha hecho en su vida. Se ríe y ríe y al final cree que está solo hasta que siente la presión de sus libros sobre su pecho, suave y abrasador donde sus dedos se presionan contra el pecho de Ji Ho por un segundo.
"Es lo más fácil que he hecho." Responde Ji Ho.
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They just fade out when you take a breath ✲ TaeCo
Fanfiction❝Ji Ho no puede ver, la voz de Tae Il es dulce como la miel, por supuesto que se enamora❞ ©heartb