Son las tres de la mañana y todo el mundo bailando, babababailando?… Mentira, son las tres de la mañana. La pelea creo que fue alrededor de las nueve y Kendall no llega, comencé a creer que de verdad se había ido con una puta a divertirse. Ya que, no va a volver, yo se lo advertí.
Yo sabia que íbamos a pelearnos, no de esta manera, algo en mi pequeña mente ignorante decía un dialogo así: ‘-Kendall estoy embarazada, -¿enserio, porque no me lo dijiste antes? –Perdón… –estoy enojado contigo -¿enserio? –no, te amo. Ahora hagamos fogosamente el amor’, Ya verán que ninguna de esas frases sucedió en realidad.
Supongo que Kendall no me amaba de verdad, supongo que era algo que había en su estúpida cabeza que le decía, ‘dile te amo, total la tonta se lo cree’, eso es lo que pienso e imagino yo, eso es lo que creo yo, o esa es la cruda verdad.
Bueno, solo quedamos yo, el helado de chocolate que con una cuchara si se puede llamarlo así por el gran tamaño que tiene lo como rápidamente ahogándome mientras lloro estúpidamente viendo una película romántica, para empeorar, y mi hermoso bebe que en este momento no tiene padre… cuando me pregunte sobre su papá le diré anónimo, individuo no encontrado.
Por ahí parece que me lo estoy tomando con mucho humor y alegría riéndome a carcajadas golpeando la mesa por la risa que tengo encima.... Pero verán que no.
La angustia y el odio hacia mi misma no me caben en el pecho, como el orgullo. Ojala todo esto hubiera pasado de otra manera, ojala no existiera en mi el hablar sin pensar y hubiera no querido que Kendall se fuera. Es culpa de los dos, por un lado por mi, acepto eso, el de ocultarle innecesariamente el embarazo de algo que era suyo, y ahora por parte de él, por dejarme sola. Ahora me doy cuenta de lo mucho que me amaba.
Ya me acosté, termino la película y el helado de tres kilos se acabó, ¿Cómo hice, para comérmelo todo?, cuando estas angustiada, estúpidamente odiándote a ti misma y triste llorando, el estomago no tiene fondo.
Puse mi cabeza sobre la almohada y la primera maldición que tengo es, sentir el exquisito y dulce perfume de hombre que usa Kendall todos los putos días infectando la almohada. Me enojo, no quería tener ningún recuerdo de él, no ahora, avente esa estúpida cosa al otro lado de la habitación quedándome ya un poco mas tranquila.
¿Dije tranquila?, perdón, error de escritura. De repente sentí un enojo venirse encima después que se me habían escapado dos lagrimas, y empecé a patalear y golpear con mis puños ese colchón cual estaba sobre el, desordenando cada parte de esa cama, sacando las sabanas, rompiéndolas, acuchillando ese colchón sin cuchillo y pataleando. Me había acordado de mi, cuando era chica, siempre hacia eso cuando mis papás no querían comprarme la muñeca que mas quería, odiándolos poco a poco, a Brittany siempre le compraban lo que quería, y a mi, una muñeca chiquita de plástico que derretía con odio sobre un fosforo… loca maniática a los seis.
Gritaba y gruñía mientras lo hacia, y hasta puede ser que haya dicho alguna palabra, pero no se entendía, se estaba ahogando con mi saliva que tapaba el algodón de la puta cama.
Narra Kendall:
Tenia los ojos rojos, no me había fumado nada pero el humo de los otros cigarrillos que aspiraba la otra gente me mataba y me hacia mierda los ojos. No les creo si me dicen que es un Marlboro.
Mi conciencia esta apunto de apagarse y no volver así que voy a decirlo rápido, estoy en un bar, como siempre… tomando, ya sabrán que, sin control, pero todo es culpa de ella.
No la entiendo, ¿Por qué me oculto eso? ¿Por qué tubo que esperar tanto para decírmelo? Desde ese primer día algo me decía que ella estaba embarazada, le daba oportunidades para que me lo diga y ella no lo decía, y la odio por eso… bueno no la odio, por ahí si o por ahí no, es confuso cuando pasa eso, escondió algo que de verdad, si me lo hubiera dicho desde el primer día, seria el hombre mas feliz de la vida.
Pero la amo, uff odio amarla, bueno no odio. Dios esta mierda me esta haciendo mas mierda a mi que a ellos mismos, mejor me voy de este asqueroso lugar.
Salí de ese lugar casi cayéndome, rápidamente me puse la gorra de mi gran buso y mis lentes negros, no quería que me sepan que estaba en un cabaret, no quería que (tn) se de cuenta que estaba ahí. Oh (tn)…
¿A dónde voy ahora? Puedo ir a mi casa pero no quiero que James me pregunte cada estupidez de porque estoy borracho y casi drogado a estas horas sin (tn). No quería hablar de ella. Ni siquiera se si quiero acordarme de ella ahora.
Me senté en el asiento de mi auto, mi cabeza se apoyó lentamente en el respaldo suspirando. Imaginándome tantas cosas, tal vez bonitas, ya sabrán que no puedo dejar de pensar en ella.
Una de las tantas cosas que imagine y que más me gusto, es tener a mi hijo, o hija, entre mis brazos tratando de enseñarle a caminar mientras que mi hermosa (tn) saca fotos.
Me canse de estar acá, así que encendí el auto y me fui.
Narra (tn):
Me abre dormido, dos o tres horas como máximo, cuando un portazo me despierta, soy tan estúpida que me olvide de cerrar la puerta. Me acerco hasta el marco de la puerta, para saber si era un ladrón, si lo era haría un bochorno y robaría todas mis cosas, pero no se escucho mas… quizá fue mi imaginación.
Me di vuelta y vi lo muy desordenada que estaba mi habitación, parecía que un huracán hubiera arrasado con todo desordenándolo muchísimo.
Tome la almohada que había tirado horas antes, la de Kendall, la abrase, dije que odiaba su olor y lo primero que hice fue olerla, mentí obviamente.
Me acosté de nuevo, iba a dormir de nuevo abrazada a esa almohada, cuando escucho que abren lentamente la puerta de mi habitación, el susto que me di que no sabia que hacer. Me van a violar.
Cerré los ojos fuertemente, tenía miedo y abrase con más fuerza aun esa hermosa almohada cuando siento que esa persona, me abraza a mí.
Kendall: Perdón por haberme ido- Me dijo con una voz tan, arrepentida, supongo. Mientras escondía su rostro levemente sobre mi estomago y en momentos acariciándolo.
(tn): -no estaba haciendo nada, solo miraba al techo mientras el me agarraba no tan fuerte, pero me agarraba- mjm- Solo pude.. emm… musitar o decir. ¿Qué quería que dijera?, oh bueno no importa. Si importa, y mucho.
Kendall: saco su rostro de mi estomago para mirarme, no tenia una cara tan feliz que digamos- Perdóname…- Le dio un beso a mi panza, si fuera débil diría ‘aww’, pero, ¿Cuántas veces tengo que decir que mi orgullo es enorme?
(tn): mjm…
Kendall: ¿(tn)?
(tn): ¿Mhmm?
Kendall: Te amo…- se acercó a mi rostro lentamente sin aplastarme, estaba pensando que si me daba un beso, lo aceptaría o no?, no lo se, se esta acercando demasiado.
(tn): mjm- Me sonrío, parece que yo también lo hice hasta que los dos reímos al mismo tiempo. Me dio un beso, un beso corto, nos separamos y nos volvimos a sonreír mientras tocaba su rubia cabellera- Yo también te amo…
Bueno, supongo que si espero un poco en vez de que me agarre la locura puede ser que las cosas mejoren...