|-Demons:Aventura de tres-|

|-Capítulo 1-|

Pueblo Azfuul

Un grupo de no más de tres personas caminaban hacia el siguiente pueblo que le tocaba por visitar,al frente estaba un chico de cabello albino y ojos rojos,piel pálida y más alto que los otros,seguido de el estaba un pelinegro con ojos cual rubí,también y alto,y por último una chica pelinegra como la noche con ojos de un verde brillante,piel no tan pálido como los mayores,y su estatura es más baja que de los chicos

Estos buscaban un llave que les faltaba para poder abrir un cofre que tenían en sus manos,viajaban por todos los pueblos,reinos y aldeas para descubrir cosas nuevas,monstruos que siempre trataban de matarlos nunca podían faltar,pero los que siempre los atacaban eran los hombres lobos,bestias feroces que alguna vez fueron seres humanos u otra especie,pero volviendo al grupo,estos llegaron a un río,los dos chicos cansados y la chica mirándolos

—A la próxima procuren de no perder la llave—dijo el albino serio,mientras sacaba la llave y lavarla en el río   

—Yo no sabía que ese perro,lobo o que se yo,se la llevaría—habló el pelinegro serio,mientras se lavaba la cara

—Yo digo que fue culpa de los dos—habló la única mujer—Torture por confiar en Death,y Death por ser idiota y perderla—dijo señalándolos,para después sonreír,mientras los chicos fruncían el ceño 

—Cállate enana—dijo e pelinegro para secarse la cara

—No,y no soy enana—esta frunció ligeramente el ceño

—Si

—No

— Si,si lo eres

—No,no lo soy

Siguieron discutiendo media hora,hasta que el albino gritó que callarán

—Perdón,señorito "Mala Sangre"—dijo burlón el pelinegro,haciendo que el albino le diera un zape y la chica se aguantará una risa—me dueles!

— Déjense de payasadas,y muévanse—dijo este enojado,ambos hicieron caso,la pelinegra se detuvó y volteó a ver al horizontes sentía que la observaban,pero quien..—Eloise,muévete—habló el albino y esta asintió para volver a caminar

A lo lejos,una persona los observaba,no se notaba su cara ni su cabello,los observaba con una sonrisa cínica,pero se amplió más al ver a la pelinegra,suspiró y se quitó la capucha rebelando su cabello negro y ojos verdes como la menor

-Muy pronto,volveremos a casa,mi pequeña Eloise—sonrió para dar media vuelta y retirarse,pero sin quitar su sonrisa...