One Hundred...

Parte única

Aun recuerdo cuando estaba pequeña, yo tenía ocho años y cada vez que, Eleonor Lopez, mi bisabuela (que en ese tiempo tenía 93 años) le decía "Abuela, por favor dura hasta mis quince"

Ahora, tengo quince y ella cien años, siempre bromeo con ella diciéndole que "está durando más de la cuenta" y ella ríe conmigo, no la había visto triste nunca, hasta me hubiese gustado ser como ella. Un día, cuando yo procedía a hacer la misma rutina de la mañana (ir al cuarto de mi bisabuela a pedirle la bendición), ella estaba acostada aun, era relativamente tarde, además de que no era normal en mi bisabuela considerando que solía dormir temprano y levantarse temprano, me extrañó y ya que me mataba la curiosidad decidí ver si seguía dormida... No lo estaba, ella estaba llorando, no producía ningún sonido, pero yo podía ver las lagrimas caer una tras otra, empapando la almohada donde ella posaba su cabeza.

Me asusté mucho, no sabía que pasaba y quería saberlo; corrí hacia la única habitación donde había una computadora, la cual era usada por mi padre y le pregunté porqué estaba llorando mi bisabuela, su respuesta no la he olvidado:

Hija, ella ha pasado por muchas cosas, ha visto morir a todos sus hermanos, eso le ha afectado mucho, sus hijos la tratan mal, sólo la cuidan porque quieren la herencia o porque sienten la obligación, ninguno de ellos lo hace porque la quiere. ¿Acaso no sabes? ¿No sabes que ella llora todas las noches por sus hermanos muertos? ¿Crees que no sufre por estar viviendo una enfermedad tras otra? Sus huesos le duelen, le molesta necesitar de los demás para poder vivir remotamente tranquila. ¿Entiendes que la sonrisa que ves todos los días es sólo para que los demás no se preocupen?

No pude evitar llorar al escuchar eso, se derrumbó todo dentro de mí, mi bisabuela, la persona que yo más quiero en el mundo, sufría y yo no podía hacer nada.

Yo me encontraba caminando por la casa cuando escuché un ruido muy fuerte y un grito, reconocí al instante la voz de mi abuela gritando "Nojoda". Corrí lo más rápido que pude hasta el baño, de donde provenía el sonido, se encontraba mi abuela sosteniendo a mi bisabuela; al instante comprendí lo que había ocurrido, se había caído mi bisabuela.

No era una caída muy grave para una persona promedio, pero ella, con la edad que tenía y sus problemas de salud pudo haberse hecho daños irreversibles. La llevaron a su cuarto y gracias a San Siwon no le había pasado mucho, sólo un leve raspón en el antebrazo y un susto.

Eleonor estaba mal, no dejaba de llorar, ya habían pasado horas de la caída y ella seguía llorando, fui a hablar con ella para intentar tranquilizarla, pero fue en vano ya que luego yo también me alteré. No quería creer lo que me estaba diciendo en ese momento...

Ya no puedo más, ya no quiero ser una molestia, me duele todo el cuerpo, no puedo caminar bien ¿Porqué no puedo morirme de una vez? Oh, Ally, cuanto lo siento, pero hasta aquí llegué...

Salí casi corriendo de la habitación porque no quería que me viese llorar, grité contra la almohada para intentar descargar un poco de mi ira, tristeza y dolor, lo cual fue inútil, me seguía sintiendo igual. Decidí volver a la habitación para hablar más con mi bisabuela, decirle que todo estaba bien, ahí fue cuando entendí lo que ella hacía... Yo quería aparentar frente a ella que todo estaba bien como ella aparenta que es feliz, no me sentía orgullosa de eso, pero así lo haría; volví caminando y limpiando mis lagrimas al cuarto de mi bisabuela...

Se encontraba tirada en su cama, con sangre en el brazo derecho la cual iba aumentando su cantidad, en la mano izquierda blandía una pequeña navaja que le había obsequiado mi tío en su viaje por Alemania, yacía inmóvil y con los ojos abiertos, miré su herida y dejé de mostrar emociones, mi cara se volvió inexpresiva, ya no quería mostrarle a nadie cómo me sentía.

Eleonor Lopez, nacida en 1917, falleció ese maldito 20 de enero, quizás tuvo una vida horrible, pero no lo demostraba, de ella aprendí a reprimir mis sentimientos, desde ese día supe cómo lidiar con las cosas. Ahora sé que acabaré como ella, pero en un principio eso quería ¿No?

Yo quería ser como mi bisabuela Eleonor...