~___~Era muy feliz en aquel entonces junto con mis padres, era tan feliz que no podía pedir más, a pesar de saber la verdad de mi nacimiento, aún así era feliz. Qué más podía pedir?
Tenia unos padres maravillosos, los cuales me amaban como yo a ellos, éramos los tres felices, solo los tres.
Tenía una madre que siempre estaba hay para mi, una madre que me queria y me amaba, sin importar nada, una madre que haría todo por mi. Amable, generosa, bondadosa, cariñosa, buena.
Por otro lado.
Tenia un padre genial, protector, honesto, atento, amoroso, en simples palabras, el padre que desearías tener.
Pero no solo los tenia a ellos, también tenia a mis abuelos maternos, ellos eran una dulzura, siempre me consentían, con cada cosa que quería, los amaba también.
Tenia una familia perfecta, no podría cambiarla por nada. Aunque....
Jamas creí que saber una verdad oculta más adelante me traería tanto sufrimiento.
A la edad de diez años, si, una edad temprana, mi padre, siempre dando la cara a todos al decir algo, me dijo que él esperaba un niño, no una niña cuando se entero que mi madre estaba embarazada. Eso me sorprendió siendo sincera, pero no me dolió, no me provocó nada, o eso creía. Mi padre siguió con que a pesar de eso, me amaba sin importar nada.
Yo ese día con una sonrisa le dije:
"...Papá, no te disculpes, yo te entiendo perfectamente."
Aunque me sentía un poco culpable, había quitado el sueño de mi padre, porque él deseaba un niño, con todo su ser, y eso lo note en su mirada cuando me lo comentaba.
Sabía que mamá no podía tener más hijos, lo que me hizo sentir más culpable.
Papá no podría cumplir su sueño....
Paso un año después de esa noticia, un día estaba con mi padre desayunando, era fin de semana y mi madre había salido, pero pronto llego y nos llevamos una sorpresa al verla con una gran sonrisa de oreja a oreja.
Mi padre fue el primero en preguntar qué sucedía, mi madre con aún su sonrísa le dijo que estaba embarazada, traia como evidencia por así decirlo, un papel que le dieron en el hospital con el tiempo de embarazo, una semana.
Mis padres no podían estar más felices en ese momento, yo también lo estaba, tendría una hermana, o un hermano.
Estaba feliz por ellos.
Pasaron los meses, hasta que se supo el sexo del bebe, era un niño. Mi padre había llorado ese día, grito a los cuatro vientos: "Es un niño" se notaba tan feliz. Yo solo le veía con una sonrisa, aunque por dentro me pregunté.
"Él habría estado tan feliz al saber sobre mi nacimiento?"
Fue la pregunta que lleve conmigo el resto del día.
Pasaron los otros meses, y por fin nació mi hermano, era muy pequeño, tan delicado, tan hermoso e unico, fueron sus palabras esa noche.
Él lloró, mi madre sonreía como nunca, yo era más reservada, por lo que mi felicidad solo fue expresada en un: "Felicidades".
Los primeros meses de vida, de mi pequeño hermano, regalos, sonrisas, cariño, amor, como un bebe lo debía recibir, mi padre estaba en cada momento con él, casi todo el día. Había dejado el trabajo aún lado por mi hermano.
Teniamos una buena situación económica, por lo que no nos debíamos hacer preocupaciones.
Pasaron los años, yo cumplí los dieciséis años, mi hermano ya tenia seis años,
ESTÁS LEYENDO
Revivir el amor (Liu Y Tu)
RomanceValora a las personas que están a tu lado, porque no sabes si estarán mañana contigo.