Rewrite The Stars [Chensung].

☆ reescribamos las estrellas ☆

-¿Qué te importa lo que todos piensen?

JiSung se encontraba hincado en frente de Chenle quién estaba sentado en la cama.

-¡No es eso!- ChenLe gritó de repente frustrado por la insistencia del menor asustando a JiSung por levantar la voz tan repentinamente. El mayor suspiró, calmandose antes de volver a hablar. -No es eso...

JiSung espero, pensando que Chenle iba a continuar pero cuando no lo hizo decidió volver a hablar.

-¿Entonces qué es?

El chico de nacionalidad china pudo sentir sus ojos llenándose de lágrimas. No quería que JiSung lo viera así, así que con la intención de disimular que estaba apunto del llanto, bajó la cabeza mirando a su regazo. Tragó duro para intentar bajar el nudo en su garganta el cual temía que le impidiera hablar claramente.

-No sabes lo que pasaría con el grupo si somos novios y todos se enteran... No es sólo acerca de nosotros, JiSung, es acerca de todos los demás también.

-Sabes que ellos nos apoyarían sin importar nada. Todos los hyungs.

La habitación se quedó callada. A Chenle se le dificultaba mantener las lágrimas cada vez más.

Después de unos segundos, JiSung se subió a la cama con su hyung, quedando sentado al lado suyo.

-Sabes que te quiero... No es algo que trate de ocultar... Y sé que tu también me quieres, así que no digas que no podemos hacer nada.

Ahora las lágrimas corrían libremente por el rostro de Chenle.

-Hyung...

El mayor de ambos no respondía nada.

-Chenle.

-Jisung...- miró al menor a los ojos ya sin importarle que lo viera llorar. -Crees que es fácil y crees que no quiero correr hacia ti pero no es así... hay cosas que están más allá de nuestro poder. Si les dijéramos a todos que queremos estar juntos, verías que ni siquiera valía la pena decirles desde un principio, nunca lo entenderían.

El menor tomó la cara de Chenle entre sus manos suavemente, presionando sus pulgares de manera gentil para limpiar las lágrimas del rostro del mayor.

-Entonces, reescribamos las estrellas, digamos que estamos hechos el uno para el otro, Chenle... - el menor bajó una de sus manos delineando la mandíbula del mayor delicada y lentamente. -Nada puede separarnos porque tu eres quien yo estaba destinado a encontrar.

Chenle bajó la cabeza buscando ya no mirar más a JiSung pero el menor pegó su frente con la de Chenle, forzandolo a volver a mirarlo.

-Depende de tí y depende de mí... nadie puede decirnos lo que podemos ser. -Jisung susurró, sintiéndose en paz al estar así con Chenle.

-Chenle, reescribe las estrellas conmigo, cambiemos el mundo para que sea nuestro...

JiSung vio en los ojos de Chenle una pizca de esperanza al mismo tiempo que el mayor sonreía pero esa esperanza se desvaneció rápidamente junto con la pequeña sonrisa que se había formado en los labios del mayor.

Aún en silencio, ChenLe se levantó sin previo aviso de la cama, comenzando a caminar lentamente hacia la puerta.

Una vez en frente de la puerta, el mayor puso la mano en la perilla y antes de salir se detuvo.

-Sabes que te quiero... No es algo que trate de ocultar...- Chenle dejó de hablar un momento y JiSung sonrió levemente esperando que el mayor volteara y regresara a su lado. Pero esa sonrisa igualmente se desvaneció cuando escucho al mayor hablar de nuevo. -...Pero no puedo tenerte. Nada bueno saldría de nosotros estando juntos. Así que no digas que podemos hacer algo.

ChenLe salió de la habitación dejando a JiSung sólo.

Ahora JiSung fue quién sintió que no podía contener su llanto.