Luchando por la verdad

3.La conversación.

Estaba afuera de mi casa buscando las llaves de la puerta en mi mochila, cuando de repente se abrió la puerta, era Khristeen.

—Pasa, te estábamos esperando —dijo Khristeen con una sonrisa amigable en su rostro.

—Gracias —dije.

  Entré y miré a Henry sentado en el sofá  de la sala, lo saludé moviendo mi mano y me senté en uno de los sillones, dejando mis cosas en el suelo. Khristeen se sentó al lado de Henry, ambos se notaban nerviosos, posiblemente más que yo.

—¿Qué es lo que quieres saber? —me preguntó Henry.

—Todo —respondí

—Muy bien, nosotros conocimos a tu madre biológica en una reunión de amigos, era la fiesta de cumpleaños de un amigo de nosotros, Richard, él nos presentó a Margot Williams, tu mamá biológica, te pareces mucho a ella—dijo Henry mirándome de pies a cabeza y con el rostro un tanto fruncido, como si tratara de recordar algo—, cabello oscuro, piel blanca y complexión
delgada, solo que sus ojos eran verdes. Era alguien alegre, culta y educada, trabajaba como organizadora de eventos y viajaba mucho. Después de ese encuentro nos seguimos comunicando, salimos un par de noches y a veces nos ayudaba a cuidar a James cuando era un bebé.

—¿James también es adoptado? —interrumpí, tenía que sacar esa duda de mi cabeza.

—No, él no es adoptado — respondió Khristeen cruzando una rápida mirada con Henry cuando lo dijo, imagino que ambos están buscando la manera de decirme esto sin lastimarme demasiado, y aprecio el esfuerzo, pero de igual manera duele, hay cosas que aunque nos las digan con la mayor dulzura y delicadeza posible, no dejara de doler.

—De acuerdo, continúa con la historia—.dije mientras ponía mis codos sobre mis rodillas.

—Perdimos comunicación por un tiempo con ella. —continuó Henry—Un día vino a nuestra casa y nos contó que estaba embarazada de una niña pero que no podría tener al bebé, ella no quería abortar, y su única salida era darlo en adopción, y por eso acudió a nosotros, tenía mucha confianza y sabía que nuestra situación era bastante buena como para poder mantenerte.

—Ella se notaba preocupada y desesperada—continuo Khristeen. Decía que corrías peligro con ella pero que no nos podía decir cuál era. Lo único que le importaba en ese momento era protegerte de un mal que nosotros hasta la fecha aún desconocemos.

—Ella era directa y no se andaba con rodeos al igual que tú —dijo Henry—En cuanto llegó nos dijo todo y el propósito de su visita, nosotros quedamos perplejos ante esa situación. Khristeen y yo ya habíamos hablado de adoptar una niña y ampliar la familia, pero no creímos que lo íbamos a hacer tan pronto, pero de igual manera estábamos agradecidos porque llegaste a nuestras vidas. No te negamos que al principio tuvimos miedo, y más que todo preguntas, de que era lo que estaba pasando, no sabíamos la razón por la cual Margot tenía que darte en adopción.

—Ella nos dio tiempo de pensar todo, —continuo Khristeen—exactamente una semana al pasar el tiempo estimado tendríamos que llamarla y decirle nuestra desición, no pasaron ni dos días cuando la llamamos diciendo que te queríamos, que queríamos que fueras nuestra hija. Tu padre y yo lo pensamos muy bien, y estábamos decididos y realmente contentos de que vinieras a nuestras vidas, fuiste como un regalo caído del cielo.

—Pero,¿ Por qué aceptaron?, No tenían porqué hacerlo, fácilmente pudieron decir que no, ¿qué les hizo decidir quedarse conmigo?. —pregunté un tanto nostálgica

—Porque eras una niña mi amor —dijo Khristeen—, un ser inocente y no sabías nada de lo que estaba pasando , nosotros tampoco sabíamos bien lo que sucedía pero si teníamos en nuestras manos el poder de protejerte lo haríamos, porque sin siquiera conocerte ya te amábamos.