HYUNG... ¿JUGUEMOS? - SUKOOK

HYUNG... ¿JUEGUEMOS? (cap. 1)

Min Yoongi, es un joven de 17 años, que, para su edad era lo más parecido a un anciano que hay; dormilón, gruñón, antisocial, entre otras, eran palabras que lo definían. Pero no por ello había que decir que este era feo, todo lo contrario, gran parte de los estudiantes de la preparatoria a la que iba volteaban a verlo cuando él pasaba por los pasillos de la misma, después de todo, nadie podía resistirce a su cabello rubio, piel tan blanca como la nieve, su cuerpo, que, pese a no ser musculoso no dejaba de ser atractivo, sus manos con dedos largos y finos que asemejaban a las de un pianista y su mirada, si, su mirada era tan profunda que sentías que podías caer dentro de un abismo y descubrir miles de secretos y sentimientos en él.
Pero entonces, si es tan guapo ¿Por qué no tiene novia?
Eso era debido a tres simples razones. Primero, como ya dije antes, Min Yoongi es un gruñon y antisocial de primera y lo suficientemente perezoso como para preferir estar solo, que gastando su tiempo con alguien -tiempo que podría utilizar durmiendo-. La segunda era porque Min Yoongi es gay. Y la tercera y más importante, es que su corazón ya había sido cautivado por su tierno vecino del departamento del frente al que a veces cuidaba cuando la madre de este iba a reuniones de trabajo, Jeon Jungkook.

Jungkook es, con 12 años, la suma de todo lo adorable en el mundo; con su cuerpecito pequeño, delgado y curvilineo sinceramente lo dejaba embobado, eso, sumado a su tierna mirada con esos ojos cafés oscuro, llegando a ser casi negros, pero con ese peculiar brillo de inocencia en su mirada y sus dientecitos que lo hacían parecer un tierno conejito bebé cada vez que sonreía, era capás de probocarle un coma diabético mientras lo observava por las mañanas cuando este se iba al colegio.

En eso pensaba Min cuando sin darse cuenta se le fue todo el periodo de clases -en el que se había mantenido despierto-, por lo cual tomó sus cosas despidiéndose de su amigo Namjoon con una simple venía puesto que este iba apresurado a su taller de ajedrez, mientras él se dirigía a su taller de música. Aun que Yoongi no lo demostrase, realmente estaba muy entusiasmado ya que a este taller también asistía Jungkook y aun que le doliera admitirlo, él podía quedarse escuchándolo cantar toda una eternidad sin aburrirse de ello.

Cuando por fin llegó al aula lo primero que vio fue a un Jungkook bastante sonrojado que luchaba por taparle la boca a un chico dos años mayor que él que creía recordar se llamaba Jimin. Pero el problema no era ese, si no que Jungkook estaba sentado sobre el regazo del otro chico mientras que de un celular que yacía tirado sobre una de las tantas mesas se reproducían lo que parecían ser gemidos.
Y joder, si, Yoongi ya había visto porno tantas veces antes, que eso ya para un chico de su edad no es nada anormal. La primera vez que lo hizo fue a los 14 años, ya que nunca le había llamado la atención, pero saber que un chico de 14 años le estaba mostrando ese tipo de videos a un niño de 12 simplemente le herbía la sangre y es que ver como ese chico de cabello naranja estaba jugando con la inocensia de SU -si, SU- pequeño ya era otra cosa. Por lo cual ni se sorprendió cuando se acercó a esos dos y tomó al menor para llevárselo de ahí a su casa tan rápido que este con suerte pudo agarrar su mochila.

Una vez en la casa del mayor este se fue a su cuarto para tomar una siesta, mientras que Jungkook estaba bastante aburrido puesto que su Hyung lo había sacado de su taller para llevarlo a su casa a no hacer nada, por lo cual se dispuso a buscar un cuaderno en su mochila en el que pudiese dibujar, cuando en eso encuentra el pequeño conjunto que su amigo, Jimin, le había alcanzado a dar antes de que Min se lo llevara a rastras. Entonces recordó las palabras de este «si quieres hacer que tu Hyung se vuelva loco por ti ponte este conjunto y pídele que jueguen a esto -entonces Jimin lo subió en sus piernas y reprodujo un vídeo-.»

Convencido de que no tenía nada que perder se dirigió al baño para ponerse dicho conjunto. Según él se veía bastante lindo con esa faldita corta de color rosa junto a esas medias largas blancas y esas oregitas de conejo. Una vez listo fue a la habitación en donde Yoongi dormía y sin pensarlo dos veces saltó sobre él para luego sentarse sobre su pelvis.