Había una vez una chica llamada Jazmín, ella no era como las demás, ella era una sirena!!. Pero ella no lo sabía...
Ella vivía con su tío, ya que su padre había muerto en un accidente y nunca conoció a su madre ni sabe que le pasó.
Ella vivía en Malibu, y todos los días iba con sus amigas a surfear. Jazmín es muy buena en eso porque su tío le enseñó.
Sus amigas Thalia y Ámbar la conocieron desde pequeña y van a la misma institución. Siempre después de clases ellas van a su casa a jugar y terminar tareas.
Hasta ahora parece una chica normal... Pero un día, al cumplir los 16, su vida cambió.
En su fiesta pasó algo muy raro, la suerte fue que nadie estaba viendo, pero Jazmín levantó todo el jugo que había en una jarra con su mente. Ella no sabe cómo lo hizo, pero se asustó mucho y se lo dijo a su tío.
Su tío no se asustó y le dijo que sólo era producto de su imaginación, pero cuando lo vio con sus propios ojos, para el todo cambió.
La fiesta acabó normal, su tío le dijo que no le dijera a nadie hasta resolver eso o al menos saber la razón.
Al próximo día ella fue a surfeae con sus amigas, y justo cuando estaba por una ola, su cabello se volvió con rayitos rosados!!!!.
Ella no se dio cuenta hasta que sus amigas asustada le dijeron que antes no tenía ese color de pelo. Ellas salieron y corrieron a casa a avisarle al tío.
Este despidió a sus amigas para poder decirle algo a su sobrina, a solas. Cuando se fueron, le dijo toda la verdad.
-Jazmín, he esperado mucho tiempo para decirte lo que en verdad eres. No eres totalmente humana, ya que tu padre si es humano, pero tu madre... Es una Sirena!!-
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