Capítulo III

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Habían pasado los días, mientras Eleaonor y Owen se seguían conociendo, con platicas todas las tardes luego de que el regresará de su trabajo y ella de sus clases... Ya eran bastante cercano, pues ya conocían mucho el uno del otro.

-Buenos días Eleaonor.-Dijo Owen mientras abría la puerta de su coche nuevo.

-Buen día Owen.- respondió Eleaonor, mientras cerraba la puerta de su casa.

Comenzó a caminar, y a pensar en lo bonito que estaba el nuevo auto de Owen.

-Pequeña, vamos súbete.-Dijo con voz fuerte Owen.

-Estas seguro que ya sabes manejar bien y no iremos directo al hospital.-Dijo Eleaonor riendo.

-Vamos súbete, te llevaré a la escuela.-Dijo Owen.

Ya habían llegado a la escuela, y Eleaonor iba a bajarse del carro.

-Gracias Owen, nos vemos luego.- dijo Eleaonor.

-Cuando quieras, pero oye ¿no te despedidas de mi?- pregunto Owen con una sonrisa picaresca en su rostro.

-Esta bien.-Dijo Eleaonor acercándose a Owen.

Pero de pronto Owen dijo:

-Espera, porque tus mejillas están rojas jajaja.

-Ya Owen, nos vemos luego tengo que entr...- dijo Eleaonor mientras Owen la interrumpía con un beso en sus labios.

Eleaonor respondió al beso, pero de pronto reacciono y se bajó tan pronto como pudo del auto sin decir nada...
Pasaron las obras y Eleaonor seguía en clases muy distraída pensando en el beso que Owen le había dado al bajarse del auto.

-¿Y si me besó porque le gustó?, ¡Ay vamos Eleaonor! Como un chico a esa edad de enamoraría de una niña como tú.- se decía Eleaonor a si misma.

Pasaron los días y Eleaonor seguía pensando en aquel beso tan profundo que le había dado Owen.

-Vamos, un sábado a estas horas que haces despierta Eleaonor.-Dijo Owen burlandose.

-Ya vez, un sábado al año no es malo mañanear- dijo Eleaonor, mientras acomodaba su cabello.

-Ya días no te veía, será que te estás escondiendo?- Pregunto Owen.

-No lo que pasa es que he tenido mucha tarea.- respondió Eleaonor.

-Se ve que es una mañana muy agradable, no quieres ir a correr?.- pregunto Owen.

-Claro, solo déjame ir por mis tennis.- respondió Eleaonor.

Empezaron a correr, mientas platicaban sobre lo que habían hecho en estos últimos días, cuando de pronto Owen le pregunta a Eleaonor:

-Así que te gustó el peso que te he dado el otro día.

-Jajaja, por Dios he probado mejores.- respondió Eleaonor.

-¡Ahh si! Dame más tiempo para darte unos buenos besos y cambiarás de opinión.-dijo Owen mientras se acercaba a los labios de Eleaonor.

Fue un largo beso, en el cual se pudo sentir la pasión y el deseo que se tenían los dos.

-Owen para, paraaa.- dijo Eleaonor.

-¿Que pasa Eleaonor?- pregunto Owen
- Owen pasa que estamos en la calle y me estás cargando... Estamos en una posición muy comprometedora.-respondio Eleaonor.

-Jajaja y eso que pequeña? Te da miedo algo?

- No es solo que siento una sensación extraña, jamás me había sentido así.- dijo Eleaonor.

-Ves eso quiere decir que nadie te había besado de la manera en la que yo lo he hecho.-Dijo Owen.

Mientras Eleaonor sonrió con algo de pena.

-¿Vamos dime si alguno de esos niños te ha hecho sentir lo que te hice sentir yo?.- pregunto Owen.

-No te responderé nada.-dijo Eleaonor.

Eleaonor jamás había sentido esa extraña sensación, se había exitado con el apasionante beso de Owen... Nunca había llegado tan lejos con un chico.

Secreto entre SábanasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora