I'll Miss You [One Shot JiKook]

Parte única.

Me despierto con un gran dolor de cabeza, todo da vueltas en la habitación.

Estoy ¿en el suelo? Al parecer sí.

Cuando intento levantarme pierdo el equilibrio, cayendo de nuevo.

-¿Qué ocurrió?

Luego de esperar a que el mareo cesara me levanto por fin yendo al baño para comprobar mi aspecto.

Definitivamente estaba llorando, toco mis mejillas frías empapadas de mis tibias lágrimas, veo mis ojos rojos inyectados de sangre, veo las ojeras que se pronuncian debajo de éstos. Mis labios están secos y levemente lastimados, estoy horrible.

De repente los recuerdos atormentan mi mente y me estremezco.

Trato de convencerme de que no recibí una llamada ésta mañana, trato de convencerme de que no recibí una llamada en la que me daban la peor noticia de mi vida, trato de convencerme de que no recibí una llamada en la que me comunicaron que el amor de mi vida había muerto.

Al escuchar esas palabras colgué y caí al suelo sin dar respuesta alguna, desmayándome.

-No, no, no..él no murió, mierda.

Tomo mi teléfono y disco su número; buzón de voz.

Llamo a sus padres; buzón de voz.

Tengo una última esperanza en que su hermano me coja el teléfono, pero no lo hace; buzón de voz.

Mierda, mierda, mierda.

Jalo mi cabello, grito, lloro, destrozo las cosas de mi escritorio, aún sabiendo que esto no solucionaría nada.

Siempre estuve consciente de que es la muerte, siempre supe que las personas se van y no regresan nunca más, siempre supe que esto iba a pasar algún día. Pero ¿por qué ahora? ¿Por qué ahora que era feliz junto a el amor de mi vida? ¿Por qué?

No encuentro una respuesta, solo sé que la muerte es inevitable.

Todo esto no me hace sentir mejor, me niego a reconocer que se fue de nuestras vidas.

Trato de relajarme, aunque sea en vano puedo pensar con claridad. Me planteo ir a su casa, no perderé tiempo llorando en mi apartamento mientras no me entero de una mierda.

No pierdo tiempo, salgo de mi apartamento y subo a mi auto.

Lo enciendo y sin tener muy en cuenta de dónde me encuentro conduzco hasta su casa con prisa, por suerte solo está a 5 minutos de la mía.

Voy un poco más del límite de velocidad pero no me importa, solo quiero llegar a mi destino. Aunque quiero llegar sano y salvo.

Tengo que esperar en el semáforo, gente caminando por las cebras, siento como todo va más lento, siento como el mundo va más lento mientras mas rápido me muevo.

Los mareos vuelven, pero no me detengo, el dolor de cabeza vuelve, pero no me detengo.

Llego a su casa y veo como están todas las persianas cerradas, la puerta, parece no haber nadie dentro.

No me importa en lo absoluto y me bajo del auto corriendo hasta la puerta. Giro el pomo y para mi sorpresa la puerta se abre, dejándome ver la oscuridad de la casa.

-¿¡Hay alguien!?-. Grito.

Oigo pasos de la cocina a la sala de estar donde yo me encontraba. Veo una cabellera verde asomarse por el marco de la puerta y logro saber quién se esconde tras ella, JiYong.

Cuando hacemos contacto visual rompe en llanto y me abraza, es correspondido.

Estoy aferrado a mi cuñado sollozando sobre su hombro, así confirmando que perdimos a uno de los seres mas importantes de nuestra vida.

-JiYong..-. Aferro más mis brazos a su espalda.

-No digas nada por favor..mis padres fueron a firmar papeles, no quise ir. No estoy bien, murió mi hermano menor. Me negaba a aceptarlo pero es así.

Decir esas palabras lo lástima, igual que a mi escucharlas.

-Esuchame por favor, la vida debe seguir, nos apoyaremos mutuamente, eso sería lo que Jimin quiere que hagamos-. Pone sus manos en mis mequillas limpiando lágrimas que no dejaban de salir, nos miramos a los ojos diciendo todas las palabras que no salen de nuestras bocas.

El abrazo se rompe debido que la puerta principal se abre.
Veo a los padres de Jimin, parecen estar vacíos, parecen no estar viviendo. Tal y como me siento yo.

-Yo..-. Dice la señora Park pero es callada por su llanto, el señor Park se acerca a nosotros y nos abraza, nos abrazamos entre todos mientras sabemos que la vida deberá seguir.

Ahora mismo tengo un debate mental y descontrol de mis emociones, pero siento que Jimin está en paz donde quiera que esté.

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Me quedé dormir en la casa de los padres de Jimin, no podía conducir de vuelta a mi casa.
Me enteré de que todavía investigan a que se debe su muerte, mientras nosotros esperamos llorando y nerviosos.

No pegué un ojo en toda la noche, nadie lo hizo, pero sé que Jimin quiere que yo sea feliz. No superaré su muerte de la noche a la mañana, tal vez me tome años, pero quiero que Jimin esté bien aún no estando en vida.

Te amo, Park Jimin.

Río con pesadez al recordar nuestros momentos juntos y que no volverán a pasar, y me largo a llorar.

También te amo, Jeon JungKook.