Whiplash + jikook

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Era tan suave, la manera en la que sus labios danzaban, tan sublime y dulce, sentía que estaba volando bajo aquél hombre.

Pero entonces se percató de algo muy importante, estaba besando a un hombre.

¡Un hombre! Jeon Jungkook el más mujeriego de toda Corea estaba besandose con su mejor amigo.

Pero... se sentía muy bien, sus labios eran tan suaves y cálidos que se negaba a separarse, simplemente no podía.

Cuando el oxígeno comenzó a faltarles Jimin se separó pero sin despegar sus rostros, mirandolo directamente a los ojos.

Jungkook no pudo mantener el contacto visual y a los tres segundos ya estaba desviando la mirada.

-Comprendo -Jimin separó sus cuerpos -Lo siento... -estaba dispuesto a levantarse, pero Jungkook lo tomó de la camisa firmemente, sin saber la razón por la cuál lo hizo, con la mirada baja y las mejillas rosadas -Hyung, no te vayas...

Jimin se sorprendió y frunció el ceño, creyó que sería rechazado.

Jungkook por su parte pensaba que el panorama era distinto pero podría tener sexo aquella noche, por la tarde estaba preocupado por quién sería su compañera a la media noche, pero ya había encontrado a alguien perfecto sin esfuerzo alguno, incluso si no era una chica.

Esta vez, Jungkook lo acercó hacia él con fuerza y lo besó con pasión.

Pero Jimin se separó, empujó a Jungkook directo al sofá con una fuerza casi sobrenatural y se puso encima de él.

No creas que jugarás conmigo Jeon -Jungkook se sintió vulnerable oor segunda vez en toda su vida y en aquella noche, Park Jimin estaba leyéndolo, y eso le hacía sentirse desnudo. -Yo no soy una de esas chicas, soy un hombre, si harás esto conmigo lo haremos a mi manera.

Y lo besó de nuevo callandolo y obligándolo a aceptar sus reglas. Tal como lo pensó antes, Park Jimin no era solo un chico, no, él era perfecto, era capaz de derretir a cualquiera con un par de palabras, incluyendo a Jungkook, quien debería estar molesto, pero no lo estaba, porque de alguna forma...

Esa era la noche que estuvo esperando desde que lo conoció.

Jimin se quitó su camisa, dejando ver sus perfectas abdominales y piel intacta, mostrandole a su amado el cuerpo que este siempre anheló ver incluso si no se había percatado de ello.

Jungkook también se quitó su chaqueta y su camisa blaca que adoraba, mostrando también el más grande deseo de su mayor.

Sus cuerpos comenzaban a moverse provacando fricción y uno que otro gemido al sentir sus miembros ya erectos frotandose entre sí bajo la gruesa tela de sus pantalones.

Parecían dos bestias siendo alimentadas por primera vez en sus vidas, sedientos de la piel del otro.

-Hyung ahh -un suspiro acompañado de esas palabras se escapó de los labios de Jungkook quien ya no tenía más que un boxer azúl cubriendo la última parte de su cuerpo que Jimin aún no conocía.

Jimin se deshizo de sus jeans también porque comenzaban a estorbar y entonces lo besó de nuevo de manera salvaje, Jeon Jungkook estaba debajo de él, excitado y suspirando debido a él, sentía que podía morir y lo haría feliz debido a ello.

-Dejame verte -mordió su cuello provocando otro gemido por parte del menor y arrancando de su hermoso cuerpo la prenda azúl que sobraba. Deleitándose con la vista de un chico desnudo y excitado, mirandole, con las mejillas rosadas, pidiendole con los ojos más.

Jimin se quitó los boxers y sonrió al ver a Jungkook sonrojándose a más no poder, intentado cubrir su rostro con un cojín, cojín que Jimin arrebató con facilidad.