Capitulo uno: mi inicio es tu fin

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Qué pasaría si todos los que quieres no están allí cuando tu más los necesitas, son malas personas, no me quieren tanto como yo los quiero, son hipócritas preocupados por sus frívolas vidas.
A quien tengo que visitar hoy o “cosechar su alma” como lo dicen es a un anciano de 99 años que tiene múltiples enfermedades, pronto su cuerpo lo vencerá y será obligado a deambular por la línea entre el mundo, el cielo y el inframundo “limbo” como lo suelen llamar. Mi trabajo es que eso no pase.
Entro con un ramo grande de flores y con una sonrisa muy bien trabajada.
-oh disculpe, como esta, yo soy Juan y vengo a alegrarle el día- mientras sale la enfermera con una mirada de preocupación yo entro
-hola jovencito, ¿eres de alguna asociación de dónde vienes?- el señor se veía feliz y saludable, casi se irradiaba un aura de afecto en el
-no, no sino vengo porque desde la ventana le vi a usted y pensé saludarlo
-¿enserio? No existen muchos jovencitos como tu
-pues, es verano y no tengo muchos amigos con quien jugar
-de vera? Pues no lo parece
-bueno además me corrieron de la casa por estar parado en la tele en pleno día
-JAJAJAJAJAJAJAJA ¡eres un pequeño travieso! Sabes yo era como tu
Mientras teníamos una animada charla el tiempo voló y la noche empezó a apoderarse del lugar y un aura muy intranquila se apodero del lugar. Olor a azufre y cuerpos descompuestos, empecé a preocuparme pero el anciano era siempre alegre y sonriente. Me conto que dirigía una pequeña compañía de botones, su primer trabajo era de lustrabotas a muy temprana edad y sus amigos eran tantos como para contarlos con los dedos de veinte personas pero de lo que de verdad le gustaba hablar era de las grandes fiestas que organizaban sus familiares y amigos.
-eran tan grandes que retumbaban en todo el barrio, a veces contratábamos dos locales vecinos para que quepan los invitados y ese día esos locales se peleaban por quien serviría la comida primero y a qué hora lo harían
-¿todo un alboroto verdad?
-pues claro, mis fiestas eran muy animadas y aunque no hubiera mucho alcohol las personas reían y se divertían como nunca
-de verdad sí que vivió una gran vida y yo desperdiciándola en la tele –mi queja forzada no podía parecer más irreal- que he estado haciendo con mi vida.
-la respuesta no es quejarse de lo que perdiste sino aprovechar el tiempo que aún lo tienes y confiar en tus amigos… sabes mañana es mis cumpleaños número cien
-es un largo numero
-mi esposa murió junto con todos mis amigos… se los llevo el tiempo… es lo que decía después de asistir al funeral
-¡será una fiesta sensacional! Dígame cual será su deseo  cuando apague las velas
-mi… deseo…-su respiración se agitaba cada vez más y le hacía difícil respirar- mi deseo es que mis amigos estén en esa fiesta
-¿no me dijo que estaban muertos?
-no, mi hijo y mis nietos mi familia, esos son mis amigos mis primeros amigos que he tenido
-¿pero aprecio a todos sus amigos?
- a cada… uno…yo los aprecio a todos
-Puede ser que se olvidaron de usted
-¡no, jamás mi familia siempre estuvo conmigo ellos de seguro estarán ahí lose! Cállate niño estúpido
-las personas no tienen un aparato que determine cuanto amor sienten por su prójimo y no saben hasta donde llegarían por ayudarlo y estar con el
-cállate niño estúpido
-corrección no soy un niño, soy la muerte
-¡ha..Has venido a llevarme!
-No, yo no ellos si –unas pequeñas manos con garras empiezan a asomarse por la puerta y unos ojos casi salidos se asoman- son más diferentes de lo que dicen los cuentos y leyendas
-¡NO…NO, NO…QUE HAGO!
-sabes te doy un consejo, cuando mueres no hay despedidas solo eres tú y lo que harás
-¡ENFERMERA! AYUNDENME –unos tacos y patas de insectos vienen y se asoma un rostro deforme sin ojos ni mandíbula
-por favor tómese sus pastillas y déjeme ¡CON MI NOVIO A SOLAS! –enloquecida sus uñas empezaron a sangrar y de sus huesos salían gigantes gusanos 
-esto no aparecen en los cuentos
-POR FAVOR AYUDAME HARE LOS QUE SEA POR FAVOR
-¿quieres salvarte? Acepta, acepta que tú estás muerto, acepta que nadie vendrá y si lo haces esto terminara
-YO…YO ESTOY SOLO, ¿VERDAD?, SIEMPRE HE ESTADO SOLO SIN IMPORTAR QUE –manos empiezan a salir del colchón donde estaba recostado, arrastrándole lentamente
-¿acaso no, todos estamos solos en el mundo? ¿Pero aunque sea así tú no estás solo? Escucha fuera de estas paredes a tu esposa y tus amigos de la infancia… jamás has estado solo
Un fuerte viento empieza a deslumbrarse y una luz empieza absorber al anciano. Las sombras y demonios se espantan.
-hasta nunca jovencito- la sonrisa del anciano se desvanece hasta que se desaparece
-hasta nunca señor, espero que le hayan gustado las flores, fueron un regalo de su esposa
La luz desaparece y los demonios enfurecidos se lanzan contra mí con gran furia
-¿les quite su alimento verdad? Bueno creo que me lo merezco pero ustedes no
El abrigo que me cubría la espalda empieza a alzarse y unas manos negras  salen de las mangas. Mi trabajo aquí esta echo

Ultima nota: [[Todas las cosas que sientes, amor, ira, orgullo, amistad todas esas cosas, todos esos sentimientos desaparecen cuando la muerte viene. Cuando yo vengo]]

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