Él y un pedacito de ella

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Tan pura, tan llena de brillo, hermosa silueta desnuda en aquel campo de bellas flores y rosas exquisitamente abierta, esperando ser tocadas por el rocío del amanecer.

Así contemplé su cuerpo, ella estaba allí, casi inerte, tan quieta.

Quien iba a pensar que este amanecer, al abrir mis ojos encontraría tal belleza... Una criatura frágil y tan llena de pureza.

Sin pensarlo me acerque lo más que pude a ella y cuando estaba ya lo suficientemente cerca, al ver su mirada; me paralicé... Sus ojos eran completamente azules y no hablo de un azul claro, era un azul tan oscuro como el cielo de la noche, pero tan brillantes que sentía ser iluminado por las mismas estrellas.

Sin poder expresar palabra alguna, ella se acercó a mí, yo seguía paralizado, no podía mover un musculo, no sabía si era su belleza o acaso ella tenía algo que evitaba que yo moviera mi cuerpo a mi antojo, estábamos tan cerca, tanto como para poder besarla, pero tan lejos a la vez con este cuerpo inservible el cual solo me permitía seguir observando.

Pude ver como alzo su brazo derecho y guió su mano hasta llegar a mi rostro, recorrió mi rostro con su pequeña y delicada mano... ¡Que delicia!, ¡Que calidez!, ¡Que paz!... todo eso sentí con tan solo un roce de su mano... (Estoy desesperado no puedo moverme y no pude hacerlo en todo ese pequeño, pero tan extenso y placentero momento)... Ella me miró, sonrió, y luego cambió su expresión de sonrisa a intriga, como preguntándose qué clase de criatura era yo... o como porqué le causaba tanta curiosidad.

Y sin darme cuenta comenzó aflorar de su piel un brillo el cual dibujaba su hermosa silueta, pero este brillo comenzó a transparentarla... (¿Por qué?!, maldición!, no puedo moverme, quiero abrazarla!)... ella me miró y sonriendo dejó caer una lagrima, la cual vi rodar por su mejilla y fue así como terminó de desaparecer... dejándome un enorme vacío en mi corazón pero con una leve luz de esperanza como si fuera a volver a mí.

Pasó el tiempo y aun me pregunto si ella estará por algún otro lugar o si ella fue solo un sueño... no lo sé.

Lo único que sé es que sigo vagando en este gran bosque de rosas y flores empapadas por el goteo que cada día veo al amanecer con la esperanza de reencontrarme con aquella dulce calidez que sentí en un solo roce de piel que paralizo mí ser por una mirada de ella.

EllaWhere stories live. Discover now