[2/2]

384 64 10
                                    

2ª Parte

—Me he enamorado de un chico.

Jongin giró la cabeza inmediatamente de la televisión a la cara de su amigo. Eran las once y media de la noche. Baekhyun estaba solo en casa, y como era propenso a rayarse la cabeza como nadie cuando estaba solo, invitó a Jongin a ver una película.

Ambos estaban apalancados en el sofá en silencio hasta que Baekhyun lo soltó.

—Em... yo, lo siento mucho, pero me gustan las tías.

Baekhyun soltó una risa y le dio una colleja a su amigo, provocando que ambos riesen.

—No eres tú, no tengo tan mal gusto.

Jongin se sobó la nuca y se mordió el labio, dejando de prestar atención a la película y girándose un poco para mirar a su amigo.

—¿Por qué me lo cuentas? —Baekhyun se encogió de hombros, abrazando un cojín.

—No lo sé, no tengo a nadie más a quien contárselo.

—No sé qué decirte.

Baekhyun rodó los ojos con una sonrisa.

—Si ya, no te esfuerces, solo necesitaba decírselo a alguien, hace que me sienta un poco mejor.

—¿No es correspondido? — Baekhyun pensó en eso.

Lo era... realmente si lo era. O al menos eso le dijo el Chanyeol malo el otro día.

—Creo que lo es. —Jongin alzó las cejas y palmeó el hombro de Baekhyun.

—Cojonudo, felicidades, serás un gay muy feliz. —Baekhyun rió, soltando un par de carcajadas leves.

—Ojalá tengas razón, ojalá.

Ya habían pasado casi dos meses desde que conoció a Park Chanyeol. Un joven que sufría un trastorno bastante complicado. Una persona peculiar y absolutamente encantadora, claro, hasta que el Chanyeol malo salía. Baekhyun sabía cuáles eran sus sentimientos, inconscientemente se había enamorado de ese chico y eso era sin duda un gran problema.

Cuando se fueron a la cama y Jongin se quedó dormido, Baekhyun sintió que no podría reprimir las ganas de llamar a Chanyeol y mantener una cálida charla nocturna. Pero Chanyeol no tenía teléfono móvil y por supuesto no era hora de llamar a su casa.

Alargó el pie fuera de la cama y tocó con este el cuerpo de Jongin, que dormía en un colchón en el suelo.

—¿Estás dormido? — susurró, zarandeándolo con el pie.

Jongin gruñó y se dio la vuelta.

Baekhyun suspiró y trató de dormirse también. Joder, no había otra cosa en su cabeza, cerraba los ojos y pensaba en él, en la suavidad de su pelo, en su preciosa sonrisa, en su cara de concentración cuando leía un libro, en su cuerpo sobre el suyo mientras se besaban...

Resopló y se cambió de postura en la cama. Esa era otra parte del problema. Le quería, sin duda le gustaba, pero también le deseaba. Le deseaba y mucho, y eso era otra mala idea. ¿Chanyeol sabría siquiera como se hacía eso? ¿Lo habría hecho alguna vez? ¿Lo querría hacer con Baekhyun?

Y otra vez las interminables rayadas. Se puso la almohada sobre la cabeza y se resignó. Al día siguiente podría verle.





A las tres y media salió disparado hacia el centro, fue tan rápido que llegó en diez minutos, pero al llegar sus esperanzas fueron machacadas por las palabras que SuHo le dijo nada más llegar.

You don't know me. [ChanBaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora