Ex de verdad ❀ SooKai

✿ Verdad

No me trates bien, ni sonrías más

pues mi alma sigue sufriendo

Sé un ex de verdad y trátame mal

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🌙

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Fue una mañana fría cuando KyungSoo se había aparecido por su casa, JongIn le abrió la puerta y lo dejó pasar, frotándose los brazos bien arropados por ropa calientita porque afuera estaba helando.

Al muchacho le castañearon los dientes y observó a KyungSoo, que tenía las mejillas arreboladas por el frío y los ojos demasiado brillantes. Era muy apuesto y JongIn sentía que su corazón saltaba enamorado cada día más cuando lo observaba de esa manera.

El mayor se aproximó a él y sin pensarlo juntó su nariz con la suya, JongIn tembló porque estaba helada, pero sonrió contra sus labios una vez que KyungSoo hubiese terminado de acortar el espacio, JongIn se apresuró a terminar el recorrido y sus labios se encontraron, moldeándose entre ellos, brindándose el calor que venían necesitando en ese momento.

ㅡ Te traje algo... ㅡ KyungSoo habló, dejando que su aliento cálido chocara con sus boca, haciéndolo estremecerse.

ㅡ ¿Es un regalo? ㅡ JongIn puchereó a sus cortos dieciocho años de edad, observando a KyungSoo asentir.

Sonrió para él y comenzó a caminar hacia las escaleras de la casa, con una sonrisa coqueta que hizo que KyungSoo tragara saliva y lo siguiera con cautela. Subía de vez en cuando a la habitación de JongIn.

Tenían años de novios y era bien recibido en su casa, pero no le gustaba hacer cosas indebidas si sus padres estaban, porque no quería que le retiraran su buen visto; KyungSoo quería ser siempre aceptado por los Kim, porque tenía un futuro que asegurar a su lado.

JongIn se giró mientras subía a toda prisa y KyungSoo frunció el ceño, regañándolo porque no le gustaba que fuese tan descuidado, porque podría pisar mal y terminar lastimado. KyungSoo no podía permitir algo así.

El mayor mantuvo la mano detrás de su espalda, agarrando con firmeza su regalo mientras ambos se escabullían a la habitación de JongIn, el menor le puso el seguro y se encaminó hacia la cama para dejarse caer, invitando a KyungSoo a hacer lo mismo.

Pero KyungSoo negó con las mejillas arreboladas y JongIn se sentó en automático, observándolo con curiosidad, porque cuando podían eran demasiado traviesos.

ㅡ Hace tiempo caminé sobre una avenida y me encontré con un lugar que me hizo recordar a ti.

ㅡ ¿Qué tipo de lugar? ㅡ JongIn preguntó, interesado en el giro que estaban teniendo las cosas.

ㅡ Cuando las vi, supe que si algún día tendría que comprarte flores, debían ser sin duda estas. ㅡ KyungSoo se notaba nervioso, sacando la mano detrás de la espalda para mostrarle un pequeño ramo de tulipanes rojos envueltos en papel celofán para protegerlas parcialmente del frío. ㅡ Quería dártelas, porque estas flores te representan, JongIn.

El muchacho lo observó, fascinado por las preciosas flores que tenía frente a él, estiró las manos como el niño mimado que era y KyungSoo avanzó para entregárselas, para entregarle más que las flores y dejarlas en sus manos.

ㅡ Sabes que soy algo serio, pero... definitivamente ㅡ KyungSoo tragó saliva, sentándose sobre la cama para observarlo mejor, con el corazón acelerado. ㅡ Te doy estos tulipanes y mi corazón, lo has tenido desde que te conocí, y vas a tenerlo siempre.