Tiro por la Culata (SeverusxSirius)

Capitulo Único.

Los merodeadores o mejor dicho Canuto mejor conocido como Sirius Black tenia una gran idea. A su parecer. Consistía en darle una poción a Snivellus que hacia de afrodisíaco para poder burlarse de él y echarle en cara lo solo que estaba.

-Listo-dijo victorioso el pelinegro al conseguir la poción del almacén privado del profesor. Por qué la tenia era algo que los chicos no querían saber.

-¿Estas seguro de esto Canuto?-le pregunto un poco preocupado el chico de lentes.

-Completamente Cornamenta-dijo extasiado mientras se dirigían al gran comedor para la cena.

-No deberías hacerlo-reprendió un castaño.

-No seas amargado Remus-dijo haciendo un puchero-¿Verdad Peter?-le pregunto a un chico un poco rellenito.

-Yo...creo que no deberías hacerlo-tartamudeo nervioso.

-¡Qué les pasa es solo una broma!-grito enojado.

-Haz lo que quieras pero después no te quejes por las consecuencias-fue todo lo que dijo el castaño y se fue seguido por dos de sus amigos.

-Amargados, además que me podría hacer Snivellus-se dijo a sí mismo-Follarme-dijo sarcástico para luego reír como desquiciado.

Siguió caminando hasta que llego al comedor y miro la mesa de las serpientes. Puso una mueca al ver a Snape al lado de su hermano menor, pero, era la excusa perfecta para acercarse. Con la mirada de todo Hogwarts encima de él camino hacia los dos Slytherin que lo miraron interrogantes. Miro a su hermano tendiéndole una carta.

-¿De quién es?-pregunto aun desconfiado mirando a su hermano mayor.

-Madre-fue todo lo que dijo mientras disimuladamente vertía la poción en el vaso de Severus que hablaba con Lucius.

-Está bien-dijo tomando la carta de una vez por todas y abriéndola.

-Bien-dijo para sentarse en la mesa de los leones mirando fijamente al Snape que después de haber bebido su jugo se levanto disimuladamente.

Sirius se levanto emocionado bajo la mirada reprendedora de sus amigos y corrió detrás del pelinegro. Cuando salio miro a los lados hasta que logro verlo dando vuelta en una esquina. Lo siguió sigiloso hasta que entro a la sala de menesteres. Sirius se irguió y entro con una sonrisa arrogante esperando ver a Severus en el suelo masturbándose o tal vez metiéndose los dedos en el culo. Nada parecido a la realidad. Severus lo estaba esperando cruzando de brazos sin la túnica. Sirius siempre se había creído dotado pero ahora que veía bien no había duda el de Snape era mucho mas prominente que el suyo. Además que se podía notar los músculos en la camisa que estaba usando.

-¿Que me hiciste Black?-pregunto siseando en un tono bajo que lo único que consiguió fue que a Sirius le recorriera un escalofrío por todo el cuerpo. Ahora se estaba empezando a arrepentir.

-¿Cómo crees que yo te hice algo? -respondió desafiante. Todo su valor se fue cuando Severus se acerco amenazante.

-¿Entonces que haces aquí?-preguntó.

-No puedo venir a la sala de menesteres-dijo terco.

-Te conozco lo suficiente para saber que no irías con las serpientes frente a todo el mundo. No quieres saber nada de las serpientes-dijo acercando su cara a la del contrario. Sirius retrocedió un paso-Te pongo nervioso Black-comento divertido.

-Claro que no Snivellus-respondió pero la voz le fallo al final.

-¿Seguro?-pregunto metiendo una pierna entre las del oji-plata y este no pudo evitar que le saliera un gemido. Se tapó la boca con ambas manos con el rostro un poco sonrojado y mirada furiosa.