┈─• 🍇 ♡ ָ࣪ 𝕡𝕦ɾρ𝗹𝗲 𖤐

•La venganza es dulce•

Era la hora, Jungkook estaba enojado y llorando, la pistola estaba cargada y en la cabeza de aquel hombre que asesino a el amor de su vida.

— ¡Jungkook! — Gritó SeokJin al ver a Jungkook.

Jungkook sólo lo miró, en ese momento SeokJin recordó toda su historia, la razón de porqué quería matar a ese hombre, pero no lo haría, no permitiría que Jungkook mate a una persona, no de nuevo. Jin estaba apunto de tratar de quitarle la pistola a Jungkook, hasta que aparecieron Jimin y YoonGi desde aquella puerta de donde entraba luz que era la única que se notaba

— ¡Jungkook, no tienes que hacer esto! ¡Esto no es lo...! —

— ¡¿Lo que qué, Jimin?! — Volteó a ver a éste. — ¡¿Lo que habría querido Taehyung?!, ¡Sé que no, sé que él quería salir de ésto, pero no dejaré que éste hombre mate a Taehyung sin remordimiento ni consecuencias! —volvió a mirar a ese hombre, que solo podía estar de rodillas y quieto por lo lastimado que estaba gracias a los golpes por parte de Jungkook. —

— ¡Jungkook, no tienes que hacer esto, olvídate de la venganza y vámonos fuera del país! — Gritó YoonGi al ver a su amigo tan enojado como nunca.— ¡Sé lo que pasaron juntos, y sé que quieres vengarte, pero no debes, tenemos que irnos! —

— ¡No me iré! — gritó de regreso.

— ¡Jeon Jungkook!

Jungkook escuchó esa voz, sabía perfectamente de quién era. Era de Taehyung, pero él no estaba ahí. Las voces eran desde su mente y no paraban, cada vez eran más fuertes y Jungkook no pudo evitar desesperarse mientras las voces seguían gritando su nombre.

—¡Jeon Jungkook! ¡Jeon Jungkook!

•FLASH BACK•

19 de Diciembre. Tae estaba corriendo prófugo de unos chicos que querían e iban con la intención de hacerle daño, Tae topó con Jungkook y este no tuvo de otra mas que tomar a Jungkook de la mano para evitar que se escapara una bala y le diera al menor.

Después de eso ocurrieron muchas cosas, incluyendo Jungkook matando a una persona, a disparos ya que estaban siendo perseguidos en una persecución y no quedaba otra opción.

Desde entonces Jungkook es cómplice y siempre estaba al tanto de Taehyung y una que otra vez tenían que salir para hacer robos. El lema de Jungkook y del tío de Taehyung era:
— "Si vas a entrar, por lo menos hazlo bien"

A Taehyung jamas le agradó esa idea ya que quería a Jungkook desde aquella noche, que ocurrieron cosas que jamás deberían de haber ocurrido.

Habían pasado 7 meses desde que se conocían, esa noche habían hecho un robo a uno de los empresarios mas poderosos y ricos de Corea y tenían que celebrarlo.

—¡Brindemos por mi sobrino y Jungkook, sin ellos no habríamos logrado nada!

Después de lo dicho, todos brindaron y unas horas más tarde, Jungkook estaba lo suficientemente borracho para no saber lo que hacía y tuvo que ser llevado personalmente por Taehyung a la casa de el mayor.

—Tae... Tae... —gemía el menor en su loco y prometedor sueño.—

— Ah, Jungkook...

El hecho de que Jungkook gimiera su nombre lo excitaba a enormes cantidades, y es que sí, Taehyung no era virgen y mucho menos santo, y desde hace rato tenia ganas de hacer algo más que robar con Jungkook.