100 hugs. |Slow Chapters|

01; Presenting the characters.

Grace McCain, aquella chica que iba corriendo por las calles de Richwood, era la misma chica que le robaba los suspiros al jugador de oro, Cody McCall.

Sí, estaba perdidamente enamorado de ella, de su cabello, de su sonrisa, de sus ojos, de su forma de ser, de su risa, de todo. Y es que ella había sido, y es su primer amor, aquel amor que jamás se olvida, y sus amigos y él, ya habían dicho que ya era hora de hacer que Grace supiera de los sentimientos de Cody hacia ella.

El problema era; ¿cómo se lo diría?, Cody jamás había tenido problemas para hablar con las chicas, mucho menos porque ellas se acercaban, pero Grace lo hacia ponerse nervioso, rojo, y sin tema de conversación, era lo peor que le podía pasar a Cody. 

Grace llegó corriendo al instituto, jadeando del cansancio, y es que su condición física era de lo peor, vió a su mejor amiga, Elizabeth en su casillero, así que fue hasta ella.

—¿Se te hizo tarde, pequeño minion?—cuestionó con una sonrisa de burla, Grace rodó los ojos, y abrió su casillero -que estaba alado del de Elizabeth-, empezó a tomar sus libros y una pequeña hoja de libreta cortada cayó al piso, guardó sus libros, y tomó el papelito entre sus manos, y sin leerlo, lo tiró al bote de basura.

—Ni lo has leído, cuánto a que era de una de tus tareas, y que luego me preguntaras que mierda era porque tu papelito se "perdió"—Volvió a decir Elizabeth.

—Entonces, diré que fue mi culpa, y ya está. Hoy no tengo ganas de nada, más que ir a casa y dormir hasta la próxima semana. De verdad, me siento jodidamente cansada—Explicó Grace.

—Cansada de... dormir todo el santo día.—volvió a decir Elizabeth.

—¡Oh!, cállate Eli.

—Lo haré, pero tú y yo sabemos que es verdad.

Y empezaron a caminar por los pasillos, con los brazos entrelazados, cada que caminaban juntas hacían eso, era una costumbre desde que eran pequeñas, y para ellas eso ya era normal, no lo miraban con morbo, ni mucho menos, como los demás podían llegar a verlo si fuera de alguien mas, obviamente todos sabían como eran ellas.

Más atrás, en el mismo pasillo, se encontraba Cody en su casillero, junto a Jaeden, su mejor amigo, y Charlie al otro lado.

—Uy Cody, tú princesa ni se ha dignado a leer el papel.—Se burló Charlie para después darle una palmada en la espalda, seguido por Jaeden.

—Seguro que pensó que era un papel suyo, y no le dio importancia, pero, podrías hacerle uno exactamente igual y meterlo ahí para la siguiente clase, o el receso, no lo sé. 

—Es una buena idea.—Apoyó Charlie, realmente no les gustaba ver a Cody triste, ese chico tiene un corazón de oro, al igual que sus padres.

—Lo haré.

El timbre de entrada a la primera clase empezó a sonar y cada uno se dirigió a su clase, Cody tenía clase con Grace, dónde ninguno de los dos se encontraban con sus mejores amigos, siempre que tenía la oportunidad perfecta de hablare, las chicas que estaban coladas por Cody aparecían, y arruinaban todo, o alguien le hablaba a Grace antes, y como la buena persona que es, siempre platicaba con todos, era muy simpática, se podría decir que hablaba con todo el instituto.

Cody la miraba desde su lugar, mirando como le sonreía de Gary, no tenía problemas con Gary, no, era muy amigable de hecho, pero le daba problema que estuviera Grace sonriéndole a él.

Y entonces Cody se puso a trabajar en la carta para Grace, bueno, no era una carta, era sólo un mensaje, un bonito mensaje corto, y en papel, como en los viejos tiempos, para que Grace lo apreciará aún más.