dunk shot / chensung

Parte única.

"Quiero un coche rojo y una novia bonita para mi cumpleaños número diecisiete" pide ChenLe, juntando sus manos con los ojos fuertemente cerrados. RenJun rueda los ojos y le da un golpe en la cabeza. Todos sus familiares se ríen por la agresión del pequeño mayor. 

"Pide algo más coherente, Lele" bufó el pelirrojo. 

"¡Es muy coherente pedir un coche rojo y una novia bonita!" lloriqueó el menor. "¡Todos queremos eso, excepto que seas Huang RenJun y tengas un novio bonito!". 

RenJun abrió mucho los ojos y la mamá de ChenLe, o sea su tía, puso sus manos sobre sus caderas. Fue así como tuvo que dar explicaciones de su vida privada que había preferido mantener de la mente chismosa de su tía. Y así fue como la mujer entendió que el amiguito que siempre recogía a su hijo y a su sobrino no era más que el noviecito del último. 

Así que ChenLe se rió a carcajadas mientras su mamá le daba "la charla" a RenJun. Obviamente él no tendría esa charla, porque para el año siguiente, él se encargaría de conseguir una novia linda y la sacaría a pasear en el coche rojo que le iba a rogar a su padre que le comprara... Aunque no supiera conducir y fuera malísimo hasta en los carritos chocones. 

...

"¿Qué me van a regalar para mi cumpleaños?" exigió ChenLe, acomodándose en medio de RenJun y JaeNo, interrumpiendo descaradamente el momento a solas que estaban teniendo. El primero le miró con mala cara y el segundo simplemente sonrió. Todos habían quedado con que le darían sus obsequios durante la fiesta (que más bien era una reunión familiar) que daría por la noche. 

"¿Por qué no te sientas con DongHyuck, eh?" bufó RenJun. 

"Porque DongHyuck me dijo que no me regalaría nada porque es pobre" espetó el chino. 

"¡Dije que te regalaría mi amor y mi presencia en tu fiesta!" pataleó DongHyuck. 

"¡Eso es igual a nada!" 

"Desprecian mi amor" DongHyuck se cruzó de brazos, haciendo un puchero y fingiendo llorar. 

ChenLe vio llegar a JiSung, a quien siempre llamaba mejor amigo, pero él solo gruñía. Él sonrió ampliamente y quiso abrazarlo, pero el menor le dio un codazo suave. Acomodando su bandeja con comida en la mesa. 

"¿Y tú qué me regalarás?" canturreó el chino. 

JiSung lo miró y soltó un largo suspiro, pero todos notaron que era un poco más raro que el usual mal temperamento de aquel chico. RenJun, DongHyuck, JaeNo y JaeMin se miraron entre sí de forma cómplice, pero siguieron comiendo. El menor de todos torció sus labios, mientras abría la lata de refresco. 

"Nada importante" respondió al fin, sorbiendo de su refresco mientras evitaba la mirada de su mejor amigo. 

"¡Pero todos los regalos de JiSunngie son importantes para mí!" 

"¿No que tu papá te iba a regalar un coche?" bufó el menor. 

"No..." ChenLe respondió tristemente, revolviendo su plato de ramen. "Dijo que para qué quería un auto si no sabía conducir y que no pagaría mucho dinero para que fuera a chocar algo" todos en la mesa se rieron, menos el cumpleañero.  

"Ah... ChenLe, acompáñame a un sitio luego de que salgamos de la escuela" le pidió JiSung, intentando disimular sus nervios mirando hacia otros sitios. 

"¿Tiene que ser hoy?" lloriqueó el menor. "Escuché de mi tía que mi mamá me regalará un perrito y sabes que siempre quise un perrito". 

"¿Por favor?"

"¡Ahhhh! ¡Nunca lo pides bonito! Debe ser muy urgente para que JiSung Pwark pida por favor" con sus dichos, se ganó un golpe en el hombro por parte del menor. 

ChenLe tuvo que esperar que JiSung fuera a buscar su bicicleta, por lo que estuvo parado un par de minutos fuera de la escuela. En realidad, estaba un poco más nervioso de lo que quería demostrar. Era cierto que pasaban mucho tiempo juntos, pero -a veces- el mayor pensaba que le gustaba un poco el menor. Pero creía que solo era una sensación. 

JiSung tocó la graciosa campanita que estaba ubicada sobre el mango de su bicicleta, sonriendo apenado. ChenLe se subió, no era necesario que abrazara al menor porque las calles no eran muy concurridas y el chico no iba tan rápido, pero lo hizo de todos modos. 

El día era frío ya, debido a que estaban casi a finales de Noviembre, pero el sol estaba en su punto máximo. Por lo que la brisa le hacía temblar un poco. Sin embargo, estaba sonriendo. Como tenían clases distintas y en sus tiempos libres siempre estaban con los mayores, no solían tener demasiados momentos estando a solas. Darse cuenta que le gustaría tener más momentos así, hizo que sus orejas se pusieran un poco rojas. 

No debieron pasar más de quince minutos cuando llegaron a un sitio en el que habían muchos árboles. Aunque no eran tantos como para formar un bosque, si daba la impresión de un pequeño espacio verde muy agradable. JiSung se bajó de la bicicleta y la arrastró con ChenLe todavía encima de ella. Había insistido en que se quedara así porque era su cumpleaños. 

Caminó un par de minutos más, no es como si estuviera disfrutando del sonido de la naturaleza porque ChenLe hacía un montón de preguntas acerca de qué clase de cosas tenía que hacer en un sitio como ese y por qué lo llevaba allí. JiSung solamente lo ignoraba porque decir algo arruinaría la sorpresa. 

Al fin llegaron al fin de ese pedazo de tierra arbolada que delineaba una especie de pequeño arroyo que separaba una parte de la ciudad de la otra. Aunque ChenLe llevaba un tiempo viviendo allí, nunca había estado en ese sitio. Por lo que se bajó de la bicicleta y JiSung la dejó tirada. 

El mayor bajó hasta cerca de la orilla, ni loco metería ni las manos porque seguro se moría de hipotermia, pero era un sitio lindo para estar. Por lo que se sentó en el pasto. JiSung se sentó a su lado. ChenLe hablaba y hablaba para rellenar el silencio, aunque ya le estaba preocupando que el menor no dijera absolutamente nada. 

"¿Éste es mi regalo de cumpleaños, verdad?" preguntó ChenLe, dejando de lado su voz aguda, para usar una más personal, mirando a JiSung. Él hizo otra mueca. El mayor sonrió. "¡Me encanta este sitio, tenemos que venir más a menudo! Pero la próxima vez traigamos comida". 

"E-en realidad esto no es todo el regalo" murmuró. 

"¿Ah, no? ¿Qué es? ¡Quiero saber! ¡Dámelo!"

"Cierra los ojos"

ChenLe acomodó sus piernas y cerró los ojos, todavía sonriente. 

JiSung lo dudó un momento. 

¿Y si lo odiaba después de eso? No quería arruinar su cumpleaños. Tranquilamente podía haber malinterpretado las señales. 

Sacudió la cabeza, ya había llegado hasta allí y no tenía ni la más mínima idea de qué hacer sino hacía eso. Así que se acercó un poquito más y presionó sus labios contra los del mayor en un toque suavecito que no duró más que un segundo. 

JiSung ni loco pensaba decirle que le había regalado su primer beso, así que se paró y recogió su bicicleta. ChenLe se quedó balbuceando y recalculando totalmente perdido. 

"¡Oye, Park JiSung! ¡No puedes simplemente besar a alguien e irte como si nada sin decir algo!"

"¿Feliz cumpleaños?" 

ChenLe le dio un golpe en el hombro, el otro se quejó fingiendo dolor. Ambos estaban totalmente colorados, por lo que el mayor se cruzó de brazos, exigiendo silenciosamente algo más. 

"No sé por qué te pones en ese plan si saber que... tú... me... gustas" JiSung hizo una mueca, restándole importancia, mientras se subía sobre la bicicleta y le hacía un gesto para que también se subiera.

En cuanto el mayor lo hizo, comenzó a pedalear totalmente tieso. ChenLe no le había dicho nada así que asumió que lo estaba odiando. Pero en cuanto volvieron al camino que transitaron un rato atrás, el mayor volvió a abrazarlo con un poco más de fuerzas, escondiendo su rostro en su espalda. 

"También me gustas" dijo bajito, pero lo suficientemente alto para que JiSung escuchara y, entonces, ambos sonrieron.