Se suponía que este iba a ser otro día de flojera, como todos los domingos, por lo que ya estábamos todos listos con lo que íbamos a necesitar: Netflix y palomitas. Todo se había vuelto muy extraño desde que los chicos se emparejaron entre sí, ya no era como antes, nos distraímos hablando idioteces, por lo general relacionadas con la película que estuviéramos viendo. Hasta que un día Namjoon se enamoró de Jin, Tae de Jungkook y Jhope casi no asistía a los domingos de flojera por encontrarse con su chica. En realidad no era algo que me molestara, bueno, en realidad sí. Se la pasan besándose y mirándose toda la película, no paran de hablar nunca y es realmente desesperante.
Jiminnie, vámonos - Dije.
- ¿A dónde Hyung? La película no acaba todavía - Dijo mirandome extrañado
Realmente quieres verla? - Dije algo molesto esta vez
- Ya me la empecé, así que... Sí - Respondió sin darle mucha importancia. Lo tomé del brazo insistiéndole que nos fueramos a lo que este reclamó al instante.
- Pero Hyuuuung - Protestó haciendo un puchero.
Mira un segundo a tu alrededor, estos idiotas me hacen sentir incómodo, nosotros estorbámos aquí - Dije señalando a las parejas que estaban tan concentrádas besandose, que no se percataron de nuestra pequeña discusión.
- Esta bien, pero me debes un helado - Dijo sonriente. Con una de esas sonrisitas que solo él sabe hacer.
Eres un odioso, a veces te comportas como un niño de cinco años. - Dicho esto en su rostro se formó uno de los mejores pucheros que he visto en mi vida, así que aparté la mirada, no quería que se diera cuenta de que me estaba riendo por la cara que había puesto.
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Habíamos llegado a mi apartamento, donde Jimin solía acompañarme a dormir cada vez que tenía una discusión con sus padres. Los progenitores de Jimin no eran personas muy agradables, especialmene por su forma tan cerrada de pensar. Sabían que Jimin era gay y no paraban de tratarlo como una basura por eso, así que se refugiaba en mi apartamento en busca de consuelo, cosa que a mí no me afectaba para nada, es más, de una forma u otra disfrutaba su compañía.
Jimin era una persona que realmente valía la pena conocer, y era una gran persona a pesar de haber sido criado en un ambiente tan mierda. Es un chico alegre, curioso, positivo, guapo, con linda sonrisa, lindo cuerpo, lindos labios, lindo cabello, unos ojos tan... Oh mierda, ese no era el tema.
En fín, amaba estar con Jimin y desde hace un tiempo para acá, creo que empecé a amarlo a el también.Jiminnie, tienes sueño ya? - Pregunté. Él y yo estabamos acostados viendo la televisión, no podía ver bien si tenía los ojos abiertos o no...
- No, tengo aburrimiento, pero nada de sueño - Respondió haciendo un puchero.
Deja de hacer esas caras, que te ves horrible - Dije rodando los ojos
- Eso no es cierto, Hyung - Dijo mirándome a los ojos, haciendo un puchero aún más grande.
No sé que haré contigo y tu horrible cara - Me levanté de la cama y me dirigí a la puerta de vidrio que daba hacia al balcón.
- Que haces, Hyung? - Preguntó Jimin atento a mis moviemientos.
Qué no es obvio? Estoy abriendo esta mierda - Dije volteándolo a ver haciendo una mueca restregándole la pregunta tan tonta que acababa de hacer.
- Para que quieres salir? Está serenando, hace frío...
Abrígate, entonces.