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"Buenos días, amor." La voz ronca de Steve resonó por toda la habitación.
Bucky sonrío acurrucándose más con las sábanas, mientras Steve repartía besos por todo su rostro.

El castaño podría acostumbrarse a que sea así todas las mañanas. Steve levantándolo con pequeños besos, oír la risa de el rubio por las mañanas y un poco de sexo, quizás.

El único problema eran los hijos de Steve.
No era que al castaño le molestaran, él amaba los niños e incluso, a veces, quería tener algunos. Sólo que Steve pensaba que ellos no estaban completamente preparados para verlo con otra persona.

Bucky soltó una carcajada cuando Steve se lo dijo. Pensó que era una broma. No eran niños. Tenían 14 y 16. ¿Cómo no estarían preparados para entender que su padre había seguido con su vida luego de el divorcio?

Pero el castaño no dijo nada más sobre el tema, trató de comprender todo aunque, sinceramente, no lo había entendido ni un poco.

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"¿Sabes qué falta una semana para nuestro aniversario?" Steve le preguntó entrando lentamente a la ducha.

"No, no es como si me lo recordarás cada segundo lo poco que falta, Stevie." Respondió Bucky burlón.

"Eres un idiota."

"Pero me amas."

"Si." La sonrisa que adorna la cara del rubio se vuelve maliciosa. "Te amo tanto que te lo voy a demostrar."

"Oh, ¿en serio?" Bucky pasa sus manos a su cuello y Steve coloca las suyas en la cintura del contrario. Lo besa.

El beso toma intensidad, Steve agarra una de sus piernas y-

"¡Maldición!"

Y en ese momento Bucky se da cuenta que tiene la peor suerte.

"Lo siento tanto, bebé. Es Annie. Sabes que tengo que contestar."

Él sale de la ducha y responde el teléfono.
Bucky ríe suavemente, viendo como Steve trata de mantener su respiración tranquila, como si no hubiera estado apunto de tener sexo con él hace un par de minutos.

El castaño sale de la ducha cuando el olor a tocino llega a su nariz. Quizás no pudo tener ese momento con Steve, pero no podrían quitarle el desayuno.

-

"No es mi culpa que tu perezoso trasero no pueda salir al supermercado una vez a la semana, Buck."

El mencionado lo ignora. No quería empezar un argumento que definitivamente perdería.

"Pensé que me amabas." Bucky trató de sonar lo más dramático posible, hasta puso su mano en su pecho para hacer notar su 'dolor'.

"Si, pero no tanto." El rubio le sigue el juego con una sonrisa. "Aparte me quedaron ricos."

Bucky le da su dedo medio como último ataque, haciendo que Steve ruede sus ojos con su sonrisa intacta.

"Necesitamos hablar." Rogers dijo.

"Estás embarazad-"

"Quiero que conozcas a mis hijos."

far from perfect // stucky auDonde viven las historias. Descúbrelo ahora