Flores.

Episodio Helianthus : Capítulo uno.

Era un día lluvioso, casi de lluvias torrenciales. Debajo del cielo color gris, un chico llamado Kohaku Akihiko, con un paraguas; de pelo rojizo corto y metro sesenta caminaba por la ciudad,  dirigiéndose a lo que parecía ser una institución.

¿Una institución? ... No una normal, era la famosísima escuela secundaria Hananokumo. Donde los chicos más prestigiosos y con buena posición económica asistían.  Cuando se hablaba de este lugar se hablaba como si fuera una octava maravilla. Pero, la triste realidad era que, al haber sólo adolescentes arrogantes y con una gran cantidad de dinero... no había mucho orden. Era un desastre total, no podía pasar una semana sin que alguna que otra tragedia ocurriera y aunque la palabra tragedia era grande le quedaba perfectamente a este tipo de indisciplina.

Kohaku entró al lugar anteriormente mencionado, era el primer día de todos entrando a primer año ¿lo primero que vio?

Confeti. Sí, maldito confeti en todo el piso, siendo lanzado por un chico rubio y alto con pecas. Un poco le cayó en el pelo, el pelirrojo frunció el ceño a la par que se lo quitaba con su diestra.

  — ¿Se puede saber qué es esto? — preguntó Kohaku con su típica expresión seria.

  —  Confeti. 

  — Y por qué confeti. 

  — Porqueeee el confeti es bonito y... me gusta lanzarlo. — dijo haciendo énfasis en su primera palabra. 

  — Uh... hm. — "Qué inmaduro... y con ese tamaño", pensó el chico. ¿En serio lo primero que tenía que ver era confeti en todo el piso?

Kohaku notó que detrás del chico pecoso se escondía una chica con lentes y coletas, pero a esto no le daría mucha atención; le daba tan igual. Siguió caminando por el lugar, asombrado por la inmensidad de la institución, ¿de verdad estudiaba ahí? No se lo creía. 

Había un pequeño estadio donde, suponía que se hacían deportes o algo por el estilo. Todos los nuevos ingresos para primer año estaban ahí, según una información dada ahí era donde iban a dar las clases. Nombres se dictaron a la par que se decían a qué clase iban. El pelirrojo no iba a prestar mucha atención hasta que dijeran su nombre.

  — 'Kohaku Akihiko, primer año B" —dijo un altavoz.—

Al escuchar esto, el pelirrojo fue corriendo a donde pertenecía. Mirando a ambos lados, pudo divisar al chico con pecas y a la muchacha con lentes... intentaría ignorarlos en clase. A su lado estaba un chico castaño con alguna que otra herida en el rostro, decidiría saludarlo aunque no se le daba muy buen eso de... socializar.

  —Kohaku Akihiko soy yo. Tu nombre, rápido.  — dijo sin mucha delicadeza, no era su culpa no saber hablar.

  — ¡Muy rudo, eh! Soy Katsuro Hiroyuki, supongo que es un placer.

 — Hiroyuki... está bien. Intentaré no olvidarlo.

  El castaño asintió, mientras se iba a hablar con otras personas. Kohaku había quedado algo solo aunque aquello, como la mayoría de las cosas, no le importaba. Cuando las clases comenzaran... intentaría socializar más. 

Continúa en el siguiente capítulo.