Los días contados

Maldición 2: La nota.

Al llegar a mi casa. Jennifer y yo, entramos a la sala. En la sala, vimos que todo lo del juego, ya estaba preparado.

En el centro de mi habitación había un tablero de madera que contenía las letras del alfabeto, los números del 0 al 9 y las palabras "Sí" y "No", "Hola" y "Adiós". También, en las esquinas de la hoja, se encontraban un sol y una luna, al lado las palabras ya mencionadas ("Si" y "No"). También había un planchette. Todo era tal cual como se mostraba en el video que le enviaron a Jennifer. Los materiales tenían todo lo necesario para jugar.

Es como si alguien supiera que íbamos a jugar la ouija... lo cual es raro, porque nunca le dijimos a nadie que íbamos a jugar. Y eso me aterra... y mucho.

No sé cómo pasó, y no quiero saberlo....pero lo que si se, es que es una advertencia o una señal... ustedes me entiende.

– ¡Jennifer!... viste... esto no me está gustando- dije asustada.

– Ay, tu siempre asustada- me dijo.

– Pero tu viste, nosotras no preparamos nada- dije un poco molesta, asustada, presionada... muchas emociones a la vez.

–Bueno, seguro que hay una explicación lógica para esto- dijo tranquila.

–Sí, y la explicación lógica es....que un espíritu o algo así... ¡lo hizo!- exclame.

– Creo que has visto demasiadas películas- dijo relajada.

– ¡Ay Jennifer!... cuando será el día en el que tomes las cosas enserio- dije molesta.

– Ah ver... nunca- dijo mientras se iba a mi habitación.

– Bueno...

Fui a beber un vaso de agua. De repente, en el refrigerador,  vi una nota que me perturbó mucho. Que decía:

"Hola Jennifer y Eva

– Soy la ouija, bueno, ese no es mi nombre. Pero la mayoría de las personas me dicen así... esto, es una advertencia... ¡No jueguen el juego o van a morir!"

– ¡Jennifer!- dije soltando la nota.

– ¿Qué?-dijo algo fastidiada.

– ¡Mira esta nota!- dije entregándosela, ella la leía muy concentrada- ¡¿no te da miedo?!

– Ay, de seguro es una broma- dijo botando la nota a la basura.

– Aja, ponte que fuera así... y ¿quién la habrá escrito?... si nosotras no le hemos dicho a nadie sobre lo que vamos a jugar.

– Ay, ya relájate, nada va a pasar.

– Esto no me gusta, nunca he tenido experiencias paranormales, ni quiero tenerlas. No voy a jugar este juego ni que me ofrezcan un millón de dólares...