ATADA A TU RECUERDO

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Ese amor lejano, ese pirata que recorre largos caminos que conoció el dolor, que se convirtió en una persona no grata, e incluso una persona buscada,un hombre que un padre no quisiera para su hija, y su hija lo haría suegro. Un hombre con encanto, dulces palabras, protector, pero mentiroso, era difícil que una mujer no se enamorara de el. De hecho las mujeres se peleaban por este pirata, y todas acabaron lastimadas, dejándose envolver, el desastre se avecinaba, el pirata huia al compromiso, dejo a muchas jóvenes en el altar, siempre lograba escapar. El compromiso una condena, para él que estaba acostumbrado a la libertad, y a su rara manera de amar. El me dijo una vez que yo era la unica mujer que el no se atrevería a olvidar,que me amaba con locura. Era la única chica del pueblo que le demostraba que no iba a ceder a sus encantos, mientras el más se desesperaba.Me llevaba rosas, me cantaba con su voz privilegiada. Hasta poemas se atrevió a leerme.Digo "se atrevió", porque el no era asi, el amor ese con tanta devoción, él no lo conocía. El solo conocia el amor pasajero, el no creía en lo que leía,pero sin embargo, se volvería un caballero, solo para poder conquistar mi corazón, porque era el mas necio, se le había puesto en la mente que yo iba ser su esposa. A veces mi padre lo sacaba con el arma corriendo, porque se quedaba a dormir bajo mi ventana, me quería hacer el personaje de Romeo, y yo me lo creí, porque el amor,no solo es ciego, sordo, también le falta picardía. 

Una noche me desperté asustada,porque oí unos gritos que venían de mi ventana, me acerque lentamente. Mire y era él, que estaba abajo, era de noche.Me asome a la ventana y lo mire. Dijo

- Amada mía, si tu corazón no puedes entregarme prefiero hundirme en estas olas.Si no puedo decirte que te amo una vez más no merezco la vida,por desperdiciar la pureza de tu alma. 

Yo solo me reía, lo creía bastante insolente, y me hacia gracia lo que decía, el no hablaba así, estaba todo ensayado para llegar a mí.Aun así, mis mejillas estaban enrojecidas, y no dejaba de mirarlo con unas ganas de poder volar y llegar hasta su lado.Mi casa, quedaba frente al mar. 

Mi padre no me permitía acercarme a el, porque sabia que eran puras mentiras las que salian de su boca, ademas el queria que me casara con un hombre de alta alcurnia no con uno que no sabia si tenia para comer ese dia.Y que vivía en la calle.

Yo le conteste... 

-Deja de molestarme, anda y buscate una de esas mujeres que te rodean. Yo no quiero un amor pasajero, serias el ultimo de quien podría enamorarme.

Cerré la cortina sin saber que haría el, con lo que le dije, seguro lo iba a tener al otro dia insistiendo en la puerta de mi casa. Regrese a mi cama. No me termine de taper.Escuche el grito desgarrador de una mujer se va a morir, ayudenlo, no sabe nadar. Mire por la ventana y el estaba muy lejos de la orilla y cada vez se alejaba mas.

Era a la madrugada, estaba solo esa señora mirandolo...

Corri desesperadamente, mis padres dormian, estaba de camison. Salí afuera y tan rápido como pude me aviento al agua,al sentir el agua tocar mi cuerpo, me estremecía, estaba helada, las olas me golpeaban con gran fuerza, pero yo era campeona de natación.Llegue hasta el, le gritaba, lo rodee con mis brazos parecía dormido, abrió los ojos, y me dijo -Mira allá.Señalo con el dedo a la luna, se la veía enorme, las olas chocaban nuestros cuerpos, el que antes parecía muerto, ahora flotaba conmigo.Yo no podía creer lo que había hecho.El dijo sonriendo mientras yo lo rodeaba con mis brazos para mantenerlo a flote.

-Valio la pena aunque no haya sabido nadar, pero se nadar, así que ya puedes soltarme, si quieres.

Lo solté y lo mire con fastidio, estaba helada, en camisón, me cubría de la vergüenza. 

Mientras el no dejaba de reírse, me llevo nadando igual, aunque yo me negué, hasta la orilla. Yo salí del agua, el se quedo en la orilla, mirando, con esos ojos llenos de picardía, y con una sonrisa burlona. 

-¡Mi salvadora!, ¿Como podré retribuir este favor?, cásate conmigo.

Yo lo mire con indiferencia, mientras el gritaba  S
-Se le transparenta el camisón madame. Volví a mi casa con emociones encontradas, subí las escaleras  me cambie. Y cuando mire de nuevo por la ventana, el estaba allí abajo mirándome, estaba vez arrodillado,todo mojado.

-Te pido casate conmigo, y hazme el hombre más feliz del mundo.

- Eso ya esta trillado caballero, ya se puede parar, y tiene desatado los botones de la camisa, se va a resfriar. 

-Valio la pena verla en camisón, es bella...

-Si seras desgraciado, vete de aqui.Que mi amor nunca lo vas a tener, más la gente de tu clase, que no sabe tratar a las mujeres.

-Dudo señora mía que no sienta algo por mi, puesto que fue la única que se tiro desesperadamente a rescatarme.

-Solo salvaba a un ser de ahogarse, porque yo si tengo humanidad.

-¿Por qué necesita darme explicaciones?. 

-No quiero malentendidos, porque esta vez la que va a cargar el arma voy a ser yo. Y no dudare en sacarlo de aquí, no vuelva más entiende.

Luego pasaron dos meses y no lo veía, miraba por mi ventana al mar, recordando la picardía que había hecho,y estaba apagada, triste,desolada. Encerrada en mi pieza, esperando escuchar a mi padre cargar el arma, para saber que el volvia a buscarme.Sabia que me estaba enamorando pero no lo podía permitir, el llevaba años conquistandome,pero esta vez lo había hecho. El día que volvió, fue que decidí no dejarlo ir, volvió con un ramo de flores, mis padres no estaban en casa, yo sali al balcon, para verlo, y el traia un anillo en la mano. Baje las escaleras, yo era una adolescente totalmente cautivada. Me acerque a el despacio, siempre se dejaba tres botones sueltos, para lucir su físico trabajado, para impresionar a las jóvenes. Yo corri un lado de su camisa, al ver pequeñas gotas de sangre en la camisa. Y vi su pecho, el estaba inmóvil, con la respiración acelerada, casi diría nervioso. Tenia mi rostro dibujado, en su pectoral. Lo mire a los ojos, y el se acerco más a mi, levanto mi mano y me puso el anillo. Y luego me entrego el otro anillo, y yo se lo puse a el. Todo esto fundiendonos en nuestras miradas,luego el dejo caer las rosas, se acerco a mi, me corrio el cabello y me beso. Cuando tuvimos que hacerlo formalmente al casamiento, el se escapo. Simbólicamente era precioso,y suficiente para el, no lo volví a ver.








UN VIEJO AMORDonde viven las historias. Descúbrelo ahora