¡Hey, mi Tattoo!

Extra.

Jade.

Salí cansada del lugar de trabajo, esto de ser abogada es agotador. Miré la pantalla de mi móvil y reconocí las llamadas perdidas de Matt. Sonreí al ver el fondo de pantalla, era una fotos de los niños y Matt cocinando.

Estaba cansada, así qué tomé un taxi. Jamás en vida pensé que iba a tener cuatro hijos. Si, no uno o dos. ¡Cuatro mocosos!

Al principio creí que iba a fracasar como madre, pero Mattew siempre estuvo a mi lado para recordarme qué  podía dar lo mejor de mí. El tercer embarazo pensé en abortar al igual que el cuarto. Pero no podía.

Matt no iba permitirlo. El producto de esos dos embarazos fueron dos niñas, y con mi otros dos anteriores dos niños. La casa era un caos.

Salí del taxi y pagué para entrar a la casa. Desde que tuve un accidente con Jake, dejé de conducir no puedo tocar un auto sin temor a que uno de mis hijos muera.

-He llegado.

-¡Feliz cumpleaños! -Una avalancha se niños dirigió a mi sonriendo. Casi caigo pero pude sujetar bien mis pies al suelo.

-¡Con cuidado niños!- Esa era la voz de Chris. Siempre tan preocupado.

-¡Feliz cumpleaños mamá!- James se acercó y me abrazó seguido de Jake, mi primera hija Sheila, y por ultimo la pequeña Marian. Seguido de Christian y Helsy los dos pequeños de Chris y Shelsy.

-Feliz cumpleaños tía Jade.- Besé sus frentes y sonreí para acercarme a mis amigos y familia, y mi hermoso esposo.

-Te pones vieja Jade.

-Sigo teniendo el ritmo.- Dije riendo.

Salude a cada uno de ellos y por ultimo pero no menos importante mi marido.

- Hola.- Besó mi boca y me abrazó con fuerza.- Feliz cumpleaños amor.

-Te amo.

-Yo te amo más Jade.