Viajeros del Tiempo

Tokio, 2001. Estoy debajo de este puente esperando que esa persona salga de la tienda. La batería de mi celular se agota, puedo ver como el brillo de la pantalla contrasta perfectamente con la oscuridad de la noche. Aparentando pensar en todo, una sensación extraña invade mi cuerpo, como si supiera lo que se viene, aunque esas falsas esperanzas solo harían que el tiempo pasara más rápido.

-"No me tarde, ¿cierto?..."

Cerca de la estación de Tokio, las preciosas calles mostraban todo su esplendor cuando una luz pegaba en sus paredes, de la misma forma, las zonas oscuras daban un miedo terrible para el que se atreviera a pasar por allí. Unas de estas calles sería testigo de las palabras que no se borrarán da igual cuántas vidas pasen, una promesa imposible de cumplir que cargaría con todo el peso de las demás existencias de estas dos personas.

New York, 1930. Triste la vida de un pobre soldado luchando ciegamente por las sucias y oscuras intenciones de su nación. Aunque dichas personas estén conscientes de las atrocidades que apoyan, no pueden dejar de hacerlo, deben seguir luchando para no morir, o en su defecto, que no mueran sus seres queridos.

Dos hombres hablarían en la baranda de ese avión, a punto de cometer uno de los actos más atroces de la historia de la humanidad, solo sus caras alarmantes, y sus manos temblorosas podrían tratar de comprender dicha situación.

-"¿Cómo está ella?"

-"Seguramente esté rezando para que todo salga bien"

Londres, 1950. El fútbol es un deporte de gran repercusión en el mundo, desde sus inicios, hemos podido ver como cautivó las mentes de las personas.

Dos amigos aficionados al fútbol hablarían en esa cancha vacía una vez más para ver cómo estaba el otro, sin saber que inconsciente siempre iban a saberlo.

Chicago, 1927. La brutal nieve golpea las edificaciones de esta pequeña ciudad. Parece que hablar se les da bien, aunque la noticia no sería la mejor en esa ocasión.

-...

Esperando por que el futuro sea más brillante, y rezando para que el pasado no haya dejado tantos resentimientos, estas personas, viajeros del tiempo una vez más se encontrarían para reescribir la historia, hasta que algún día, logren cambiarla.