Chanyeol siempre fue un gran admirador del Bowling más conocido cómo bolos, así que cuándo se le dio la oportunidad de competir contra varios idols en la categoría de dicho juego en los ISAC 2018 no dudó en ofrecerse para representar a su grupo.
Se la pasaba varias horas al día practicando aquel "deporte" tanto así que sus dedos estaban algo maltratados pero nada que una buena pomada no pudiera sanar.
El antes mencionado se encontraba en el camerino que compartía con Jooheon, integrante del grupo Monsta X.
–Chanyeol hyung, ¿cómo has estado?– preguntó el peliverde acercándose al mayor para envolverlo en un abrazo.
Ambos chicos eran amigos desde la escuela, Chanyeol siempre le agradecía al menor por los buenos momentos que pasaron juntos cuando eran sólo unos niños llenos de sueños e ilusiones, por eso cada vez que se lo encontraba en alguna ceremonia de premios o en programas de música se acercaba para darle un cálido abrazo o un amigable apretón de manos.
Chanyeol sonrió palmeando la espalda del menor.
–Bien, trabajando duro todos los días– mencionó abrochándose su muñequera en la mano derecha– ¿Y tú?
–Igual que siempre, grabando sin parar, hace poco tuvimos una gira por algunos países de Norteamérica y Sudamérica, fue una experiencia inolvidable– respondió Jooheon con una alegre sonrisa haciendo que sus ojitos formaran medias lunas.
–Eso es bueno, debo admitir que el comeback que tuvieron hace algunos meses me dejo sin habla– dijo Chanyeol abriendo sus ojos de la impresión causando sonrojo en las mejillas de Jooheon.
–Siempre tratamos de dar lo mejor para nuestras Monbebes, sin ellas no estaríamos donde actualmente nos encontramos– sonrió mostrando sus dientes, Chanyeol asintió con la cabeza, opinaba lo mismo que su amigo.
El celular de Chanyeol sonó haciendo eco en aquel camerino, tomó el aparato y vio la pantalla, Kyungsoo lo estaba llamando.
Chanyeol miro apenado a Jooheon por tener que terminar la plática tan de repente.
–Esta bien, nos vemos en la competencia– dijo el menor despidiéndose con la mano mientras se alejaba.
Chanyeol le sonrió hasta que el contrario se fue. Rápidamente contestó su celular.
–¡Kyungsoo-yah! ¿Cómo estás?– grito muy emocionado para el gusto del bajito quién tuvo que alejar el celular de su oreja.
–Lo importante aquí es cómo estás tú, ¿nervioso? ¿preparado?– dijo Kyungsoo desde la otra línea, no sabía porque pero juraría que hasta el mismo estaba más nervioso que Chanyeol.
–Estoy súper bien, no quiero alardear mucho sobre mí pero soy consciente de mis capacidades así que sin duda llevaré la victoria a casa– respondió alegre y con aires de diva.
–Bájale a esos humos, eh– una sonrisa se formó en el rostro de Kyungsoo aunque el mayor no la podía ver– Cuídate mucho ¿si? No quiero que llegues con ningún rasguño o hematoma a casa– lo regañó el menor, Chanyeol rodó los ojos por la preocupación de su novio.
–Lo sé mi amor, prometo llegar sano y salvo– respondió Chanyeol.
Un miembro del staff había entrado al camerino, haciéndole señas para que cortara la llamada.
Kyungsoo suspiró, sabía que aunque le rogara, de alguna u otra forma Chanyeol llegaría lleno de rasguños.
–Me tengo que ir bebé, la competencia ya va a comenzar, nos vemos en casa, te amo.
–Suerte, te a– Kyungsoo no alcanzó a responder cuando Chanyeol ya había cortado la llamada.
El menor hizo un puchero que si Chanyeol hubiese estado ahí con él lo encontraría bastante adorable. Con los nervios a flor de piel, Kyungsoo fue directo hacia la cocina a tomar un vaso de agua para ver si podía relajarse.
🎳✨💘
Luego de unas horas, Kyungsoo se enteró por terceras personas osea por la chismosa de Baekhyun, que la competencia de bolos había finalizado y que como Chanyeol se lo afirmó, llevaba la victoria a casa.
Le pareció extraño que el mayor no lo hubiera llamado emocionado contándole aquella noticia, revisaba su celular a cada minuto esperando alguna llamada pero nada, no habían indicios de su novio.
El menor se mantuvo atento a todas sus redes sociales, aburrido de no saber nada sobre la competencia. Hasta que bajando por el timeline de Twitter, vio una foto que no le gustó para nada, es más hizo que su cuerpo se inundara en celos.
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Inconscientemente las manos de Kyungsoo ya se encontraban formando puños, tenía los nudillos blancos y la envoltura del chocolate que había comido hace unos instantes estaba siendo cruelmente aplastada.
En cada tweet se encontraba esa foto y ni hablar de Naver.
Kyungsoo enojado apagó su celular y se sentó en la cama con los brazos cruzados esperando a Chanyeol.
