04 (Maratón 1/4)

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Supongo que nunca es tarde para volver a hacer las cosas que amo..

Siento mucho haberme ausentado y jamás haber dado alguna razón, pero en el mensaje que puse hace unas semanas atrás lo expliqué. Espero y puedan comprenderme U-U

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"Espero que nos volvamos a ver" Las palabras de Namjoon aún resonaban en su cabeza, hacían cosquillas en los rincones de su cuerpo y provocaban sonrisas amplias en su boca.

Recordaba aquel chico alto, de tez morena, que hace sólo dos semanas atrás le invitó a comer. Tan misterioso y atractivo.

Se intentó convencer a sí mismo que se olvidara lo que ese hombre le hizo sentir, quería resignarse a no recibir ninguna llamada más de él, pero era imposible.

Esos hoyuelos decorando sus mejillas realmente le fascinaron, su gruesa voz le provocó corrientes eléctricas en su espina dorsal.

Se culpaba por estar anhelando una llamada de un hombre que a penas conocía.

—Papi...

Al espabilar vio a su pequeño niño a su lado, vistiendo el kigurumi de charmander que le obsequió su hermana en su cumpleaños. Jungkook puso sus manitas en su pequeño estómago y se sobó suavemente.

—Kookie quiere comidita — dijo el niño subiéndose con mucho esfuerzo a la cama de su progenitor.

Seokjin sonrió y envolvió el menudo cuerpo de su hijo entre sus brazos.

—¿Mi bebé quiere tomar leche en biberón? — preguntó el mayor con una tenue sonrisa burlona.

—¡No! — exclamó Jungkook con obvia ofensa— Kookie ya está muy gande para biberón.

—Cierto, ahora tomas en tu tacita de iron man, ¿verdad?

Jungkook asintió orgulloso de sí mismo. Seokjin sonrió y dio un sonoro besito en la mejilla de su hijo, ganándose la sonrisa más exquisita que han visto sus ojos. El mayor se levantó aún con su niño en brazos y se dirigió a la cocina.

Sentó a Jungkook en una de las sillas, le entregó un par de carros de juguetes que solía guardar en la cocina, en caso que el pequeño quisiera acompañarle mientras él prepara la comida y se dispuso a preparar el desayuno para ambos.

Preparó dos tazas, una de Mario Bros y otra de Iron Man, una con café caliente y la otra con leche tibia.

Le entregó la taza a su pequeño y dejó la suya en su puesto, preocupándose además de alejar los carritos del niño, ya una vez sucedió que por estar jugando con su taza cerca, estuvo a nada de quemarse; También preparó tostadas y las dejó en el centro de la mesa.

El desayuno transcurrió tranquilamente, Seokjin y Jungkook parecían estar dentro de una burbuja, donde se olvidaban por completo del resto y disfrutan hasta el mas mínimo segundo de padre e hijo.

Ya con la pancita llena, Jungkook pudo ir a su habitación para jugar. El castaño lavó las tazas de manera despreocupada, hasta que el ringtone de su celular sonó, asustándole, casi provocando que rompa la taza preciada de su hijo. Maldijo por lo bajo, secó sólo su mano derecha y contestó sin mirar el nombre del remitente.

—¿Hola? —habló elevando un poco su tono de voz. Acomodó el celular entre su oído y su hombro para poder continuar lavando la loza.

—¿El joven Kim está molesto? — esa voz.

Seokjin abrió amplio sus ojos y sin querer soltó el platillo recién lavado, provocando un estruendoso ruido.

—N-Namjoon... —mordió su labio inferior, escuchó unos rápidos pasitos acercándose y supo que tendría que limpiar antes de que Jungkookie viera el desastre e hiciera un drama— Lo siento, no estoy molesto.

Written in the sky 🌸 NamjinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora